El caso singular de Palmanyola, única Entidad Local Menor existente en Baleares, plantea un escenario especial a la hora de plantear la gobernabilidad del Ajuntament de Bunyola, municipio al que corresponde. De hecho, se da la circunstancia, en un momento en el que el equipo de gobierno durante esta última legislatura (EOB-PSOE) puso sobre la mesa la opción de acabar con la ELM, que el alcalde pedáneo del núcleo coincida o forme parte del posible pacto de gobernabilidad en el consistorio de la Serra.
Porque la coalición entre Som AVI-El PI ha cumplido con los pronósticos y volverá a ostentar el control sobre la Entidad Local Menor de Palmanyola, al ser Arnau Llinàs el candidato más votado este 28 de mayo, muy por delante de Joan Baos (PP). El nuevo escenario que se abre en el Ajuntament de Bunyola, donde el pacto entre Esquerra Oberta y PSOE no les daría la mayoría suficiente como para repetir la experiencia de los dos últimos mandatos, convierte a Som AVI-El PI en bisagra para decidir hacia qué costado se decanta el color político del consistorio durante los proximos cuatro años.
Una legislatura en la que se podría dar coincidencia de siglas y políticas entre Bunyola y Palmanyola, toda vez que si en esta última mandará Som AVI-El PI, en el consistorio esta coalición ha obtenido tres ediles, que sumados a los cuatro de la formación más votada, el Partido Popular (gana dos regidores respecto a 2019), podría dar una mayoría suficiente para gestionar el municipio hasta 2027. Eso sí, la otra carta con la que puede jugar o negociar Som AVI-El PI es un acuerdo de gobernabilidad con Esquerra Oberta de Bunyola, que se queda con tres regidores, por los dos del PSOE y el que conserva Vox.
Joan Toni Riera es el candidato de los populares a la alcaldía de Bunyola, mientras que Miquel Ballester lidera la lista del Som AVI-El PI y Mercè Bujosa es la número uno de Esquerra Oberta de Bunyola. Entre ellos estará el futuro alcalde de Bunyola, que recogerá el testigo de Andreu Bujosa (EOB), que ha portado la vara durante los últimos ocho años.
Meses atrás, la Sindicatura de Comptes de les Illes Balears (SCIB) emitió un informe en el que veía la posibilidad de disolver la Entidad Local Menor de Palmanyola «para acabar con duplicidades innecesarias», recomendando al Govern esta medida. Una tesis que el ahora alcalde en funciones, Andreu Bujosa, defendió con el fin de agilizar el engranaje administrativo que une a ambas instituciones.