Maria de Salut es un pueblo relativamente pequeño pero con una política local nada fácil. Basta con decir que las dos últimas legislaturas tuvieron mociones de censura. La peculiaridad de la última son los socios. Anti naturalmente, XMaria, reconvertido en estas elecciones en Més per Maria, se alió con su antagonista, el PP. Un pacto entre los dos consiguió hacer salir del gobierno al alcalde Biel Mas (PI) que estaba en el mando gracias a otro pacto, pero con el PSOE.
Así estos últimos años, Més per Maria y PP han gobernado juntos callando bocas y trabajando desde la tranquilidad y sin demasiados contratiempos ni disputas demostrando que sus diferencias ideológicas han quedado aparcadas cuando se trata del interés del pueblo.
Con estos antecedentes parece difícil predecir los resultados electorales de este 2023. Solo tres partidos estarán en la palestra después de la desaparición del PI, que no ha sobrevivido a la moción de censura. Los tres tienen candidatos que ya forman parte del actual Ajuntament y los tres querrán y tienen, opciones de hacerse con los votos que hicieron en 2019 al PI el partido más votado.
Una vez desaparecido, el resto de partidos buscarán conseguir los 400 votos del partido regionalista. Quién lo consiga será el que gane las elecciones en Maria.
Si estos votos se reparten, PSOE, Més per Maria y PP se disputarán el entrar o no en el gobierno municipal.
Aunque a priori parece que sin mayorías Més y PSOE pudieran liderar un pacto de gobierno, la realidad es que, si no hay gobiernos en solitario, el estrambótico pacto entre los ‘populares' y los ecosoberanistas tiene más opciones de repetirse que el pacto de izquierdas, y es que el actual candidato de Més, Bernat Quetglas, es un ex edil del Partido Socialista del que salió por discrepancias con las decisiones de la cúpula nacional.
Así pues, no sería ya raro que el pacto entre derecha y izquierda vuelva a repetirse en el municipio del Pla.