Finiquitadas las elecciones generales sin haber logrado el diputado deseado, Més encara ya las locales y autonómicas convocadas para el 26 de mayo. Y lo hace sacando pecho y atribuyéndose el mérito de algunos «hitos» de esta legislatura, como el decreto que protege la posidona o la ampliación del Parque Nacional de Cabrera. «Hemos sido y seremos el motor del cambio en Baleares», defendió Miquel Ensenyat, el candidato al Govern. Y añadió: «si somos un ejemplo a seguir es porque las personas de Més per Mallorca nos hemos arremangado para poder impulsar políticas valientes».
Antoni Noguera, alcalde de Palma y candidato a la reelección, se expresó en la misma línea. «Cuando hay que salir a gobernar no nos quedamos en el banquillo sino que nos implicamos para mejorar la vida de los mallorquines», señaló, poniendo como ejemplo la regulación del alquiler turístico vacacional o la Ley de Igualdad, entre otros. Noguera advirtió de que estas políticas deben tener continuidad. «Hemos puesto las bases de un cambio de modelo en solo cuatro años, ahora es imprescindible que sigamos para que lo que hemos realizado tenga continuidad», añadió.
Ensenyat también defendió que Més es «la primera fuerza de izquierdas en Mallorca en implantación territorial», con más de veinte alcaldías ostentadas estos cuatro últimos años y más de 150 regidores en distintos consistorios. «Més es la fuerza necesaria, somos el cambio que acabó con la hegemonía histórica de la derecha en las instituciones de Baleares», dijo.