Més per Mallorca y sus socios enmarcados en Veus Progressistes han manifestado una ambivalencia de sensaciones en esta noche electoral tras conocer los resultados de las elecciones generales en Baleares: por un lado no han logrado el objetivo ansiado de obtener representación parlamentaria en Madrid por primera vez en su historia, aunque al menos han sentido el alivio de que, probablemente, el próximo Gobierno de España sea progresista y de marcada tendencia de izquierdas.
«Nos ha penalizado el voto útil, la dualidad de la izquierda es una particularidad que se suele dar en Baleares, y es evidente que esta vez, con Vox, la gente ha primado el voto a PSOE y Podemos», ha afirmado el candidato de la coalición Guillem Balboa.
Balboa se ha felicitado por la participación «altísima» de la jornada. Pese a ello «el resultado no ha sido bueno, se ha activado mucho el voto útil», ha ratificado el también alcalde de Alaró, aunque ha recordado que «esto es solo la primera parte de una batalla» que vuelve el 26 de mayo, con las elecciones autonómicas y locales.
Pese a todo, Balboa ha manifestado que no lo fían todo a un ejecutivo socialista, y ha expresado una matizada «preocupación por las alianzas que se puedan dar».
Finalmente, el número uno de Veus Progressistes ha destacado como «porcentualmente las izquierdas en Baleares suman más que la derecha». Sobre el descalabro de los populares, que pierden por mucho la condición de primera fuerza en las Islas, ha dicho que se confirma una tendencia que se produce desde las elecciones andaluzas.