El vicepresidente de la CEOE y presidente de la patronal del Metal (Confemetal), Javier Ferrer, propuso ayer recuperar la figura del aprendiz, con un sueldo inferior al Salario Mínimo Interprofesional (SMI) hasta que acabe el periodo de formación y se incorpore definitivamente a la empresa.
En una entrevista con Efe, Ferrer reconoció que puede ser criticado por este planteamiento, pero afirmó que el SMI (641,4 euros al mes) «evita» que los jóvenes, cuya tasa de paro está en el 48 %, puedan acceder a un primer trabajo.
Según explicó el vicepresidente de la CEOE, su propuesta se enmarca dentro del modelo dual de formación alemán, que combina los estudios con las prácticas remuneradas en las empresas.
Paralelismo
Para el presidente de Confemetal, la formación dual alemana es «muy buena» y «no se diferencia mucho de los antiguos aprendices que había en España y que nos cargamos».
Lo que se propone es que un joven que salga de una formación profesional tenga un salario inicial de «300, 400, 500 euros» para que pueda entrar en una empresa, explicó.
En cuanto a si los salarios han de ligarse a la productividad, consideró que en una situación como la actual subir los sueldos es «suicida» y costaría puestos de trabajo.
Respecto a los impuestos a las grandes fortunas o a los bancos, el dirigente de la patronal empresarial califica la propuesta de «magnífica demagogia».