El candidato socialista al Congreso por Baleares, Pere Joan Pons, ha manifestado este jueves que entiende «la frustración» de la población de cara a la nueva convocatoria de elecciones del 10 de noviembre, pero ha llamado a votar «porque es la mejor manera de conseguir estabilidad».
Pons ha insistido en que España necesita un Gobierno progresista «para no retroceder». Además, ha considerado que esta nueva convocatoria electoral es prueba del «funcionamiento democrático» del país y ha comentado que en la repetición electoral de 2016 «hubo gente que no se quejó tanto».
El socialista ha dicho que se presentan «comprometidos con ser la primera fuerza otra vez» en Baleares y con la intención de no «hacer una campaña a la contra», sino «en positivo».
En respuesta a preguntas de los periodistas, ha incidido en que no piden «ninguna segunda oportunidad», puesto que es el sistema legal el que «obliga a ir a elecciones». Además, ha defendido la actuación del PSOE. «Prefiero fallar en una negociación que no ponerme de corto ni bajar al campo. No recuerdo tanto enfado por que Rajoy no quisiera ni siquiera salir a calentar», ha enfatizado, haciendo un símil futbolístico.
Pons ha reconocido que ha habido «oportunidades» para formar Gobierno y considera que deberían haberse recogido «en forma de coalición primero o de pacto programático después».
Preguntado por iniciativas aprobadas en el Parlament en las que se critican aspectos de la gestión del Gobierno estatal, Pons ha dicho «respetar» la actuación del Parlament y ha defendido el trabajo del Gobierno de España en beneficio de Baleares, citando temas como el paquete de medidas por la quiebra de Thomas Cook. En este punto, ha atribuido la aprobación de estas proposiciones a una «estrategia» de Més per Mallorca y ha incidido en que «la situación no es sencilla para un Gobierno en funciones».
Respecto al posible recurso de inconstitucionalidad a la Ley de Residuos de Baleares, ha declarado que no cree que «llevar un tema al Constitucional sea cuestionar la política» autonómica.
Por su parte, el candidato al Senado por Mallorca, Cosme Bonet, ha animado a la población a votar porque es «un privilegio en un país que ha vivido durante tantos años una dictadura». Bonet ha defendido que el PSIB es «la única opción que realmente tiene un proyecto claro», mientras en otras fuerzas «hay candidatos que abandonan».
El candidato del PSOE al Senado por Mallorca ha resumido el proyecto socialista en cinco ejes: feminismo e igualdad, cohesión territorial y europeísmo, transición ecológica, refuerzo del Estado del bienestar y calidad del empleo y fortalecimiento de la economía.
Igualmente, Susanna Moll, que también repite candidatura al Senado, ha asegurado que en el último año ha quedado «demostrado» que «el tándem Armengol-Sánchez funciona muy bien» y ha recordado medidas como la subida del salario mínimo o la aprobación del Régimen Especial de Baleares (REB).
Moll ha avisado también de que España está funcionando con presupuestos del Gobierno de Rajoy prorrogados «y esto ocasiona muchos problemas».
También serán candidatas al Senado Patricia Abascal por Ibiza y Formentera y Carme Garcia por Menorca. Las candidaturas del PSIB apenas tienen cambios respecto al pasado 28 de abril.