Este año la Asociación de Comerciantes de Menorca (Ascome) celebra el cuarenta aniversario desde su fundación en 1978, cuando un grupo de empresarios del sector unieron esfuerzos para defender el comercio de la isla. Actualmente aglutina 441 establecimientos adheridos y en cuanto afiliación media en la Seguridad Social es el sector privado más importante de la isla, a gran distancia del resto; sin embargo, desde la crisis ha descendido el número de establecimientos abiertos y la tendencia sigue siendo a la baja.
No existe un factor único, pero la irrupción del comercio online está afectando negativamente a la facturación de muchos negocios, cuya estrategia pasa por cerrar en temporada baja para poder sobrevivir o bien especializarse en venta de bienes y servicios para el turismo.
BALANCE NEGATIVO. No existen datos disgregados por islas de la evolución económica del comercio, pero sí de los datos de afiliación de número de trabajadores y también de empresas dadas de alta. Si nos fijamos por sectores según la actividad económica que abarca los últimos nueve años, quien más empleo genera en Menorca es el comercio minorista y mayorista.
El año pasado empleó a 5.181 trabajadores entre asalariados y autónomos. Le sigue a una distancia considerable el sector de restauración que en 2017 empleó a 3.505 personas, el sector de la construcción con 3.283 y finalmente alojamiento con 2.364. Es cierto que el sector económico que más notó la crisis fue la construcción, pero en segundo lugar se sitúa el comercio minorista y mayorista.
De 2009 a 2017 se han cerrado 137 tiendas y se han destruido 183 puestos de trabajo. “Los sectores de restauración y alojamiento van creciendo lentamente, pero la apertura de nuevos establecimientos comerciales no crece al mismo ritmo”, explica Vicente Cajuso, presidente de Ascome. Si Menorca tenía una media de 922 empresas de comercio al por mayor y por menor, en 2017 ha descendido hasta las 785, si bien desde 2015 hay una lenta recuperación con nuevas aperturas. Desde la Administración pública se es consciente de la situación y por eso resulta habitual la firma de convenios de colaboración en materia de formación y financiación de campañas comerciales de estímulo y apoyo. “Con el Consell hemos firmado prácticamente cada año un convenio en este sentido”, comenta Cajuso.
ACCIONES Y SERVICIOS. Desde Ascome, tanto su presidente Vicente Cajuso como el secretario de la entidad Jordi Bosch, mantienen el compromiso de la entidad con sus asociados con una batería de acciones y actuaciones durante todo el año para incentivar la dinámica comercial local, así como de servicios de apoyo y asesoramiento al comerciante.
En este sentido, en marzo del año pasado organizaron la decimotercera edición de la Feria de Stocks en el recinto ferial de Maó, en la que participaron 43 expositores; en mayo sumaron la tercera edición del Día del Cliente con el objetivo de buscar la fidelidad de los clientes, ofreciendo productos en promoción durante dos días, y en noviembre promovieron la celebración del Black Friday en una iniciativa conjunta emprendida desde la Confederación Española de Comercio. “El año pasado un 25% de las pymes de comercio a nivel nacional participaron con descuentos llevando un evento que nació en el terreno online a cualquier tipo de establecimiento”, explica Jordi Bosch, secretario de Ascome.
Otra de las iniciativas fue la organización de un ciclo de conferencias enfocadas al comerciante que se celebraron en Alaior, Ciutadella, Maó y Ferreries. “A nivel de asociación cada año suben las consultas de tipo fiscal, administrativo, laboral y jurídicas, por este orden”, detalla Bosch.
En 2017 se recibieron 1.662 consultas formuladas por empresas asociadas a Ascome, un 10% más que el año anterior, pero lo que más ha crecido han sido los servicios ofrecidos, un 32 por ciento respecto al año anterior.