Hay más trabajadores que nunca en Balears. Las Islas llevan acumulando unos años de bonanza y crecimiento económico que dejan su huella en el mercado laboral, que este verano ha batido récords. En el mes de julio había 562.423 afiliados a la Seguridad Social (un 5,4% anual más), una cifra histórica que no se había alcanzado nunca en el Archipiélago, mientras que el paro ha descendido hasta los 39.154 desempleados (lo que supone una disminución del 14% respecto a julio de 2016). El desempleo registrado no es el más bajo de la historia, ya que en los años precrisis era menor que en la actualidad. Y a pesar de todo, la calidad del empleo no mejora. De hecho, solo poco más de uno de cada tres afiliados tiene un contrato indefinido a tiempo completo. Sin embargo, la calidad de la relación laboral difiere de manera sustancial según el sector y la hostelería es la peor parada, donde solo uno de cada diez afiliados es fijo con contrato indefinido.
Precariedad. Ha sido una de las palabras más escuchadas en los últimos años, que ha llegado de la mano junto a otro concepto: recuperación. La alta temporalidad del mercado laboral balear está marcada en gran parte por la estacionalidad del turismo, que crea un gran número de empleos en las Islas de manera directa e indirecta.
En el segundo trimestre de este año había 440.176 afiliados a la Seguridad Social en régimen general, de los que solo un 37,82% tenía un contrato indefinido fijo discontinuo, de la máxima calidad. En cambio, la temporalidad afectaba al 37,82%, ya fuera a tiempo completo (28,49%) o a tiempo parcial (9,33%).
Asimismo, la modalidad de fijo discontinuo es una peculiaridad del mercado laboral de Balears que ya acapara el 17,56% de todas las afiliaciones al régimen general.
LA HOSTELERÍA. Hoy, la calidad de la ocupación en Balears está determinada por completo por el sector o la rama de trabajo. El peor parado en este sentido es la hostelería, que ocupaba entre abril y junio a 135.215 trabajadores afiliados al régimen general. Solo un 11,28% de ellos tenían un contrato de la máxima calidad, indefinido a tiempo completo, que suman 15.252 afiliaciones. Cuatro de cada diez afiliados en la hostelería al régimen general son fijos discontinuos (53.804, un 39,8%), y un 33,8% tienen contratos temporales (sumando 61.448 afiliaciones en hostelería). Otros 220 afiliados tienen contrato de formación.
Cabe mencionar que en último año el sector de la hostelería ha dado empleo a 8.885 personas más en el segundo trimestre. Las afiliaciones que más han aumentado son los contratos temporales a tiempo completo (11,72%), seguido de los contratos indefinidos a tiempo completo (10,22%).
La hostelería tiene dos grandes ramas muy diferenciadas en el ámbito laboral, que son el alojamiento, por una parte -con 76.463 afiliados en el segundo trimestre, un 7,6% más-, y por otra los servicios de comida y bebida, que agrupa a 58.752 afiliados al régimen general -un 6,3% más-. El ramo del alojamiento, por sus circunstancias, presenta un mayor número de fijos discontinuos, un total de 36.689, que son casi la mitad de todos los trabajadores del ramo (48%). En cambio, en los servicios de comidas y bebidas la contratación mayoritaria es temporal (51,3%), donde uno de cada tres trabaja a tiempo completo (20.093) y 10.049 son temporales a tiempo parcial.
OTROS SECTORES. La otra cara de la calidad del mercado laboral según los datos de afiliación al régimen general son los trabajadores empleados en actividades financieras y de seguros (90%), en suministro energético (90%) o en la Adminitración pública, Defensa y Seguridad Social (73%), que tienen en su gran mayoría un contrato indefinido a tiempo completo. En el comercio los indefinidos son casi la mitad (47,5%), al igual que en la sanidad (47%), mientras que en la educación es algo mayor (60%). Y en la contrucción un 40,2% de los 32.854 afiliados al régimen general tienen un contrato de la máxima calidad.
En el último año los afiliados han aumentado para todos los tipos de contrato (de media un 6,38%), siendo los temporales a tiempo completo los más destacados, con un incremento del 11,47%. Mientras que el número total de afiliados con contrato de máxima calidad apenas ha variado su representatividad, es más, ha bajado en proporción: eran 155.027 afiliados entre abril y junio el año pasado, un 37,47% de todos los afiliados al régimen general, y en 2017 han sido 163.493, que son un 37,14% del total. En 2009 eran el 46%.
Mientras, los afiliados con contrato temporal son en proporción más este año (37,82%, con 166.476 trabajadores) que el pasado (37,36%, cuando eran 154.575).
Otro dato que llama la atención es la parcialidad. Más de setenta mil afiliados al régimen general tienen un contrato a tiempo parcial, ya sea temporal (41.079) o indefinido (30.090). Es decir que de cada seis afiliados al régimen general, uno tiene un contrato que no es a tiempo completo. Eso sí, esta modalidad ha perdido cierta fuerza en el último año: la contratación indefinida a tiempo parcial ha crecido un 4,69%, menos que otras modalidades, mientras que la temporal a tiempo parcial ha disminuido un 2,39% y mil personas menos que en 2016 tienen este contrato.
En julio, la afiliación total ascendió a 562.423 personas en las Islas, 28.829 más respecto a un año antes. Un total de 94.813 personas cotizan en el régimen de trabajadores autónomos en julio (2.003 más que hace un año, un 2,2% más), mientras que el resto de regímenes suponen 467.610 afiliados (6,1% más). Balears tiene, de este modo, una presencia ligeramente inferior de autónomos frente al conjunto de España, donde representan el 17,5% de los afiliados, frente al 16,9% en el Archipiélago.
PARO REGISTRADO. El paro ha disminuido un 14% en un año, pasando de los 45.530 desempleados de julio de 2016 a los 39.154 del mes pasado. Cabe tener en cuenta que en un mismo mes de julio de hace cinco años los parados llegaban a 75.524, con lo que el paro registrado es hoy casi la mitad. Sin embargo, todavía no se ha alcanzado el nivel de paro habitual en la temporada precrisis. En comparación, en los años de bonanza en un mes de julio se quedaba por debajo de los treinta mil (28.156 en 2005, 26.932 en 2006 y 29.334 en 2007).
De este modo Mallorca tiene 32.853 parados (-14% anual), Menorca 2.481 (-14%), Eivissa 3.684 (-13,7%) y Formentera 136 (-24%).
Eso sí, entre junio y julio el desempleo aumentó un 0,7% con 288 parados más, mientras que en el conjunto de España descendió un 0,8%, tal y como también pasaba en años anteriores en el Archipiélago.
El desempleo continúa afectando más a las mujeres -21.141- que a los hombres -18.013-. Un total de 3.203 jóvenes menores de 25 se encuentran en paro, al igual que 2.746 extranjeros de países de la Unión Europea y 4.136 extranjeros extracomunitarios.
Una de las preocupaciones que genera este marco laboral optimista es el desempleo de larga duración. De hecho, 14.742 personas llevan más de un año en paro registrado, es decir, más de uno de cada tres parados es parado de larga duración. El número de personas que llevan 12 meses o más seguidos en paro registrado apenas ha variado en el último año ha pasado del 40,27% en julio de 2016 al 37,65% un año después. Son 3.593 parados menos en la franja de 12 o más meses en paro, lo que supone una disminución del 19,60% anual para ese mes.
Este comportamiento está directamente relacionado con que hay un sector de población, el de los mayores de 45 años, que tienen grandes dificultades para reincorporarse al mundo laboral. Hace un año más de la mitad de los parados tenían 44 años o más (50,83%), y hoy ya son el 51,79%, a pesar de que el número absoluto se ha reducido de 23.141 a 20.278.
Por sectores, donde más baja el paro en términos porcentuales del mes de julio es en la agricultura (-29,9%), con la entrada de la temporada de recogida de frutas y hortalizas de verano.
CONTRATOS. La contratación es harina de otro costal. Balears es la comunidad que presenta el mayor número de contratos indefinidos sobre el total de los firmados, pero aun así la temporalidad es totalmente predominante. En julio se firmaron en el Archipiélago 55.792 contratos, 2.314 más que en julio de 2016 (un incremento del 4,3%). De estos, 47.679 fueron temporales (el 85,5%) y solo 8.113 (el 14,5%) fueron indefinidos.
En Mallorca la contratación indefinida fue del 14,1% (5.507 sobre 39.068); en Menorca, del 12,8% (572 sobre 4.475); en Eivissa la contratación indefinida alcanza el 14,4% (1.602 contratos de 11.125), y en Formentera, el 38,4% (432 de 1.124).
Más de la mitad de las relaciones laborales firmadas en Balears en julio son de menos de tres meses. Uno de cada cinco es de menos de un mes. Y solo uno de cada siete contratos que se firmaron en julio fue indefinido -ya sea fijo discontinuo, indefinido a tiempo completo o indefinido a tiempo parcial-.
La evidencia es clara: la precariedad en los contratos no cesa. En julio, los contratos firmados por menos de un mes son el 21,33%, prácticamente igual que en años anteriores más que el año pasado (21,34% en 2016 y 20,94% en 2015). Y la suma de contratos de menos de un mes firmados de enero a junio tampoco ha variado significativamente (18,11% en 2017, 18,35% en 2016 y 18,34% en 2015).
Aun así, Balears es la comunidad que genera más contratos indefinidos (14,54% sobre el total), frente a la media del 7,9% para el conjunto de España en el mes de julio. En el mes de abril -el último para el que se ofrece esta información- se firmaron 53.420 contratos en las Islas: 6.243 indefinidos (11,7%), 45.476 temporales y 1.701 convertidos que pasaron de temporales a indefinidos (3,2%), lo que suma un total del 14,9% de contratos fijos en abril.
EPA. En cuanto a la Encuesta de Población Activa (EPA), ofrece resultados optimistas, ya que en el segundo trimestre de 2017 la población ocupada aumenta un 1,4% en comparación con un año antes y baja un 12,1% la población parada.
La población activa -personas en condiciones y dispuestas a trabajar, lo hagan o no en ese momento- ascendió a 625.500 personas, 2.500 menos que un año antes. La tasa de actividad es del 65,7% -del 59,8% para las mujeres y del 71,7% de hombres-.
La población ocupada asciende a 554.500, 7.400 más que un año antes. De este modo, la tasa de ocupación es del 58,1%, la más alta del país y muy superior a la del conjunto del Estado (48,7%).
En cuanto al paro según la EPA, se estimó de 72.000 personas entre abril y junio de este año en las Islas. La tasa de paro es así del 11,5%, que es del 12,1% para los hombres y del 11% para las mujeres. En contraste, la tasa de paro en España fue del 17,2% en el mismo periodo. Balears presentó, de este modo, la quinta tasa de paro más baja por detrás de Navarra (10,55%), La Rioja (10,92%), País Vasco (11,23%) y Aragón (11,39%).
Sigue habiendo 18.000 hogares de Balears en los que todos sus miembros activos están en paro entre abril y junio. Poco a poco mejora la situación de las familias. En 2012 eran el 9,56% de todos los hogares, mientras que en 2017 son el 5,1%.