Balears sigue siendo un territorio muy atractivo donde invertir. El capital extranjero busca valores refugio y los principales, el sector turístico y el ladrillo, se han visto beneficiados por los flujos que llegan de otros países. La inversión extranjera bruta alcanzó en los tres primeros trimestres de 2016 los 505.387.990 euros, una cifra que triplica el registro del mismo periodo de 2015, cuando Balears se anotó una entrada de capital directo de 156,8 millones de euros. En comparación, en todo el año 2015 Balears recibió 267,4 millones de inversión extranjera directa.
Mientras que en Balears el flujo de capital procedente del exterior ha crecido, en el conjunto de España ha disminuido, según los datos que ofrecen DataInvex y el Ibestat. La inversión extranjera directa o bruta en los primeros tres trimestres de 2016 fue en el conjunto de España de 11.199.032.860 euros, un 32,6% menos que en el mismo periodo de 2015. Esta disminución se atribuye a que el pasado año fue un año extraordinariamente positivo.
Como es habitual, gran parte de este capital recala en Madrid y Barcelona. Solo estas dos comunidades acapararon el 74% de la inversión, mientras que en Balears llegó el 4,5% del total.
Estas buenas cifras de llegada de capital extranjero están relacionadas, según las fuentes consultadas, con la fiebre de compañías internacionales por comprar hoteles en Balears, inversión inmobiliaria, compra de empresas locales por parte de multinacionales y otras inversiones como por ejemplo las compras de maquinaria.
La inversión que llega a las Islas procede en su inmensa mayoría de países de la Unión Europea. En los primeros nueve meses de 2016, un 81,60% de estos fondos procedía de la UE-15, con un total de 412,4 millones de euros. Hasta 33,9 millones provenían de América del Norte, un 6,70%; 2.975.770 llegaron de Latinoamérica (0,59%); desde Asia y Oceanía arribaron 1,1 millones de euros (0,23%), y 608.180 euros provinieron de África (0,12%). Llaman la atención los más de doce millones (12.835.930 euros, un 2,54%) que llegaron procedentes de paraísos fiscales.
POR SECTORES. ¿Y en qué sectores se invierte este capital? La mayoría en inmobiliaria, sector turístico y finanzas. Los datos clasificados por actividades económicas indican que un solo epígrafe movió el 45,4% de los fondos llegados, por valor de 229.653.560 euros, que se destinaron a actividades auxiliares de los servicios financieros. En concreto, se trataría de inversiones extranjeras en Balears en el sector de “actividades de intermediación en operaciones con valores y otros activos”, que se refiere a operaciones por parte de terceros en mercados financieros, correduría de bolsa o cambios de moneda. Sin contar con esta partida, la inversión extranjera en los tres primeros trimestres sería aún así un poco mayor a la de otros años.
Además, casi 141 millones de euros se invirtieron en servicios de alojamiento, un 27,9%. Es decir, que el segundo sector que más dinero recibió del extranjero es el de hoteles y otros alojamientos turísticos.
Las actividades inmobiliarias recibieron más de 58 millones de euros, un 11,6% del flujo de capital total. Las mayores inversiones correspondían a compraventa de bienes inmobiliarios por cuenta propia (34,4 millones), alquiler por cuenta propia (18,9 millones) y gestión de la propiedad (4,5 millones).
Un total de 32.072.430 euros se invirtieron en los nueve primeros meses de 2016 en actividades deportivas, recreativas y de entretenimiento, de los cuales 26.868.690 llegaron en el primer trimestre. En concreto, Datacomex refleja que en estos nueve meses 26,7 millones se invirtieron en actividades de clubes deportivos y 5,4 millones en otras actividades recreativas o de entretenimiento, y todo el dinero es procedente de América del Norte. Coincide con la llegada de Robert Sarver al Real Mallorca en el mes de enero, cuando se convirtió en accionista mayoritario y realizó una ampliación de capital de poco menos de 21 millones de euros -una cantidad a la que hay que añadir el importe de la compra de las acciones de Utz Claassen-.
Además, la construcción de edificios recibió 24,5 millones de inversión extranjera. En concreto, 24.366.850 llegaron por actividades de promoción inmobiliaria y 121.380 por construcción de edificios residenciales.
Otros 15,3 millones se contabilizaron en actividades de contabilidad, teneduría de libros, auditoría y asesoría fiscal (un 3% del total).
Y casi 1,5 millones se dedicaron a actividades de agencias de viaje, operadores turísticos, un 0,29%.
El resto de sectores que recibieron inversión extranjera directa en los tres primeros trimestres de 2016 presentan cifras residuales, con partidas inferiores al millón de euros.
Figuran entre estas últimas la agricultura, ganadería, caza y servicios relacionados; la industria de la alimentación; la ingeniería civil; la venta y reparación de vehículos de motor y motocicletas; la comercialización al por mayor e intermediación de comercio excepto vehículos a motor; el comercio al por menor excepto vehículos de motor; transporte terrestre y por tubería; transporte marítimo y por vías navegables interiores; almacenamiento y actividades anexas al transporte; servicios de comidas y bebidas; telecomunicaciones; programación, consultoría y otras actividades relacionadas; servicios de información; servicios financieros excepto seguros y fondos de pensiones; actividades de sedes centrales y de consultoría de gestión; publicidad y estudios de mercado; otras actividades profesionales, científicas y técnicas; actividades de alquiler; actividades administrativas de oficina; educación; actividades sanitarias; actividades de creación, artísticas y de espectáculos; actividades de juegos de azar y apuestas; y otros servicios personales.
DESINVERSIONES. En cuanto a la desinversión extranjera en Balears, se va reduciendo año tras año. Esta partida se refiere a liquidaciones de la posición de inversión en España por parte de titulares no residentes o ventas de estas inversiones. La información de desinversiones no se desglosa trimestre por trimestre por comunidades autónomas, pero el último informe publicado por el Ministerio indica que en el primer semestre de 2016 fueron solo de ocho millones en Balears, frente a los 12 del mismo periodo de 2015 y los 41 del primer semestre de 2014.
Al contrario, las inversiones brutas fueron de 261 millones de euros en el primer semestre de 2016, 74 millones entre enero y junio de 2015, y 109 millones en el mismo periodo de 2014.
CAMBIOS FRENTE A 2015. En comparación con el total anual de 2015, la inversión extranjera directa en construcción de edificios entre enero y septiembre de 2016 se redujo de 79,8 a 24,5 millones de euros. En cambio, el flujo de dinero en servicios de alojamiento ha pasado de los 57,9 millones a los casi 141. La inversión en actividades auxiliares a los servicios financieros era prácticamente inexistente en 2015 y en 2016 se apuntó 229,7 millones.
En 2015 tuvieron más importancia que en 2016 las actividades sanitarias, con una inversión extranjera directa de 20,4 millones y los servicios de comidas y bebidas, por valor de 20,76 millones.
Josep Ignasi Aguiló, profesor de Economía Aplicada de la UIB, considera que la inversión extranjera directa está asociada mayormente al sector turístico y la construcción. “La mayoría de empresas extranjeras con presencia en Balears prestan servicios turísticos, de servicios o de distribución. Estas inversiones están muy relacionadas con la construcción o la compra o reforma de establecimientos turísticos”.
Para el experto, se trata de signos que afianzan la buena marcha de la economía balear. “La inversión es una variable avanzada, lo que indica que hay confianza por parte de los inversores en la economía de las Islas y que la economía tiene recorrido. También puede señalar que los inversores se anticipan a posibles restricciones”, explica Aguiló.
La inversión directa presenta un gran crecimiento en 2016. Como se puede observar en el gráfico, la tendencia histórica de flujos de capital que Balears recibe del exterior era inferior a los 300 millones de euros anuales, con tres picos especialmente destacables en 2008 (548 millones), 2013 (799) y 2016 (505 millones hasta septiembre). El de 2013 se explica por la llegada de fondos relacionados con seguros, reaseguros y fondos de pensiones por valor de 619 millones.
A nivel internacional, el análisis de la Dirección de Comercio Internacional del Gobierno central ofrece un patrón de crisis y posterior recuperación. El informe considera que en 2015 los flujos de inversión extranjera directa alcanzan el mayor nivel desde 2015. Sin embargo, señala que parte de la inversión extranjera corresponde a reestructuraciones corporativas y que, por tanto, el impacto sobre la economía real es menor.
Las actividades que recibieron más inversión extranjera en el conjunto del país durante el primer semestre de 2016 fueron la industria manufacturera (1.606 millones), actividades inmobiliarias (1.156 millones), construcción (778 millones) y actividades financieras y de seguros (685), de un total de 6.716 millones.
DE BALEARS AL MUNDO. La estadística de Comercio recoge también el flujo de inversión procedente de Balears hacia el extranjero. En 2015 esta cifra fue de 188.600.230 euros, de los que 84,8 provenían de seguros, reaseguros y fondos de pensiones, 57 de agencias de viaje y 44,7 eran actividades de alojamiento. De manera similar, entre enero y septiembre de 2016 la inversión de Balears a países extranjeros fue de 128.293.220 euros (89 millones en agencias de viajes, 21,7 en servicios de alojamiento y 14,9 en seguros).
La emisión de flujos de inversión al extranjero procedentes de Balears es residual en comparación con el total de inversión española fuera, ya que solo supuso el 0,62% de la inversión española en el exterior en 2015 y el 0,78% en los tres primeros trimestres de 2016.