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La construcción destaca en Maria, Porreres y Costitx

Imagen de archivo del Ajuntament de Maria. | Antoni Pol

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La construcción se recupera después de la parálisis sufrida en los últimos años. El pueblo más especializado en este sector es Maria de la Salut, que en 2014 registraba un Valor Agregado Bruto (VAB) del 34,6%. También es muy importante en Porreres, donde alcanza una actividad del 19,9%, y en Costitx, con un 19,5%. Se trata de cifras muy por encima de la media balear, que es del 5,8%. En el conjunto del Archipiélago, alcanzó la cifra de 1.379,9 millones de euros de VAB en 2014.

El resto de municipios de Balears donde la construcción tiene un peso en la actividad superior al 15% son Santa Maria (17,4%), es Migjorn Gran (17,2%), es Castell (16,6%), Lloret (16,1%), sa Pobla (15,8%), Llubí (15,3%), Campanet (15,1%) y Mancor (15,1%).

Este indicador mide la actividad global de los sectores de edificación, ingeniería civil, demolición, instalaciones eléctricas y lampistería.

Por islas, las Pitiüses lideran la especialización y la importancia del sector de la construcción balear, lo que tiene sentido por la gran cantidad de reformas hoteleras que se dan y el hecho de que la construcción en Eivissa y Formentera registra la mayor recuperación de Balears. En concreto, un 7,9% del valor agregado bruto de Formentera proviene de la construcción, y un 7,3% de Eivissa. En Menorca es del 6,9% y en Mallorca, del 5,4%. El nivel actual de especialización en construcción de Balears es similar al de la mayoría de regiones europeas, que se mueven entre el 5% y el 8%.
Por contra, donde hay menos actividad del sector de la construcción es en Banyalbufar y Santa Margalida (ambos municipios con un 4%), Deià (3,8%), Palma (3,6%), Estellencs (3%) y Alcúdia (2,9%). Para Escorca no se existen datos disponibles.

ALBAÑILERÍA Y CANTERAS. Maria de la Salut es un pueblo muy conocido sobre todo por la construcción y la agricultura, tal y como explica su alcalde, Biel Mas. “Tenemos una serie de empresas familiares muy importantes de construcción, algunas de ellas con un volumen de trabajo muy elevado, además de fábricas de prefabricados, almacenes de material y una cantera. El pueblo pasó de una tradición agrícola dedicada al cultivo de secano, sobre todo a los cereales, a la construcción, que sigue siendo muy importante aunque nos estamos abriendo poco a poco al turismo de interior”, indica Mas. En el directorio de empresas de Maria de la Salut aparecen 15 empresas de construcción que ocupan a 161 personas.

En concreto, aunque los municipios con un nivel de especialización similar a los de Maria son Costitx y Porreres, los que hacen una contribución similar al sector (del 0,5%) son Bunyola, Ferreries, Esporles o Alaró.

En cambio, Palma, aunque está menos especializado en construcción, por motivos de volumen acapara el 28,9% de toda la actividad de este sector en Balears. Fuera de las Islas, la comparación con el resto de España es similar, como también con el resto de regiones de Europa.

En cuanto a Porreres, existe una gran tradición del sector de la construcción vinculado a las canteras y fábricas de materiales prefabricados de hormigón. La agricultura, que sigue siendo importante, ha dado paso en las últimas dácadas a otras actividades. Entre sus empresas, destacan las de construcción, restauración, eléctricas, agroalimentarias y carpinterías y según Impulsa en 2014 tenía 23 dedicadas a la construcción.

Y en cuanto a Costitx, ocupa el tercer puesto en especialización en construcción. Antoni Salas, primera vara, pone de manifiesto que en el municipio tienen empresas de albañilería muy especializadas. “En el municipio, las segundas y terceras generaciones de albañiles se ha formado en técnicas especializadas y obras de envergadura, y esto les ha llevado a hacer reformas en toda la isla. Trabajan especialmente en edificios religiosos y en el casco antiguo de Palma”, explica Salas.

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