Temporada récord de visitantes en Menorca y cifras históricas en viajeros en el aeropuerto, ocupación hotelera y aumento de facturación urbi et orbi. La planta hotelera cerró julio con una ocupación media del 95,2 por ciento (¿quién se acuerda ahora de las amenazas de Airbnb?), lo que supone un aumento de 3,8 puntos porcentuales respecto al mismo mes del año pasado. Según datos de la Asociación Hotelera de Menorca, que ha renovado junta y presidente este mismo verano, la cifra de ocupación alcanzada es la más alta de un mes de julio, al menos desde el año 2008. Por otro lado, un 51,47 por ciento de las empresas turísticas ha aumentado también en julio su facturación en comparación al mismo mes del año pasado. Se trata del mayor porcentaje registrado este 2015 según los datos de la encuesta sobre la temporada turística hechos públicos por PIME.
En la cara B del disco, la alerta lanzada por el Observatorio Socio Ambiental de Menorca que advertía que en la isla se habían superado las 200.000 personas la segunda semana de agosto. Como apuntaba Esther Mascaró en Hosteltur, si los habitantes censados de Menorca son alrededor de 90.000 y las plazas turísticas legales son alrededor de 47.000 ¿dónde se alojan las 63.000 personas restantes que han estado esa semana en la isla? La oferta de alojamientos legales y no regulados está, prácticamente, al 50% (quizás algo menos si tenemos en cuenta que yo tengo dos familiares alojados en casa y muchos otros menorquines seguro que también) y este es otro tema a resolver.
Por ello, la noticia de la creación de un grupo de investigación turística interdisciplinar, formado por profesionales del sector, expertos, profesores y representantes políticos que el Institut Menorquí d'Estudis ha decidido poner en marcha este mismo verano es una excelente propuesta.
Un think tank que sea capaz de orientar en soluciones para que se puedan neutralizar los efectos de la masificación que se está viviendo, una preocupación que pone en peligro el equilibrio medioambiental. Coincido con la opinión expresada en prensa por el coordinador de Política Territorial del GOB, Miquel Camps, en la que afirma que Menorca debe competir en calidad y no en cantidad, que la masificación también depende del modelo que proyectemos.
Creo que ha llegado el momento de que Menorca sea ejemplo de alguna cosa de manera decidida. Tiene todas las cualidades para serlo. Solo hace falta que decida cuál es su camino y tome cartas en el asunto.