Los Jardines de Alfàbia, en su envidiable e inmejorable ubicación a los pies de la Serra de Tramuntana, dan la bienvenida a un nuevo y especial inquilino. Nada menos que a Joan Miró, que desde este jueves forma parte de los espectaculares terrenos a través de su obra Téte de Femme (Déesse), de 1970, cedida al espacio por Successió Miró. La inauguración de la escultura contó con la presencia de personalidades como Joan Punyet Miró, nieto del artista y consejero delegado de Successió Miró; Pedro Vidal, secretario autonómico de Cultura del Govern; Antoni Fuster, vicepresidente del Consell; Marian Serralta, alcaldesa de Bunyola; y Antònia Maria Perelló, directora de la Fundació Miró, entre otros nombres.
La escultura se ubica de manera estratégica en el estanque a los pies de la casa principal. Allí, se une de manera armónica al paisaje, realizando un contraste con el espacio, con siglos de historia, y la procedencia temporal de la obra, que es del siglo XX, y su propio estilo. Esto fue lo que destacó Punyet Miró, que fue quien habló primero para destacar que era «un día histórico para la familia Miró» gracias al «atrevimiento» de colocar esta escultura aquí, en el Coll de Sóller. Punyet Miró comentó el «sueño hecho realidad» que es poder juntar las raíces mallorquinas de Miró y su «homenaje» al mundo femenino en esta obra que es símbolo de «amor a su madre, su mujer y su hija».
Algo similar destacó Cristina Zaforteza, de la familia propietaria de los Jardines, cuando describió de «tarde feliz» la de ayer por la inauguración de esta obra que «permite disfrutar de un estilo artístico que se suma a los ya existentes en Aflàbia». De esta manera, indicó Zaforteza que desde ya se puede «disfrutar de esta obra mironiana en un jardín mediterráneo».
Según comentaron los dos protagonistas, la obra está cedida por parte de Successió Miró, procedente de París ahora mismo, durante cinco años prorrogables automáticamente a los Jardines de Alfàbia, lo que permitirá que durante el próximo lustro como mínimo pueda acudirse hasta el emplazamiento para no solo maravillarse con la arquitectura y el paisajismo del lugar, sino también con una obra de arte de uno de los creadores más universales que han vivido en Mallorca como es Joan Miró.
El año pasado, según informó Zaforteza, alrededor de 80.000 personas acudieron a este paraje natural e histórico, unos datos nada desdeñables que ahora con la colocación de Téte de Femme (Déesse), una escultura que cuenta con 54 años de vida y que durante los próximos cinco reposará plácidamente al lado de los nenúfares del estanque de los Jardines de Alfàbia, a los pies de la Serra.
con todos los respetos... es un bodrio