«El rock sí interesa, porque el reguetón es muy infantil y con un ritmo muy malo»

El cantante de la conocida banda habla sobre el concierto que ofrecerán en Inca este 5 de abril

El cantante de Los Rebeldes, Carlos Segarra –en el centro–, junto al resto de miembros de la banda.

El cantante de Los Rebeldes, Carlos Segarra –en el centro–, junto al resto de miembros de la banda | Foto: Jose Sevilla

| Palma | |

«Mi padre era el representante de Yanko en Catalunya, País Vasco y València. Por eso, mi relación con Mallorca es especial. Con ocho años viajé en un avión Caravelle a la Platja de Palma. Xerr perfectament mallorquí, idò!». El cantante de Los Rebeldes, Carlos Segarra, recuerda los lazos que le unen a la isla y a las Pitiüses –«tengo una relación muy estrecha con Eivissa y con la gente del mercadillo de Las Dalias»–, mientras presenta el primer concierto de la gira Más sabe el diablo. Se estrenarán, este sábado 5 de abril, en el Primavera Fest de Inca. En 2024, cumplieron 45 años sobre los escenarios y lo celebraron con el disco Al este del edén. Este 2025 grabarán nuevo material.

¿Qué significa para Los Rebeldes actuar en este festival de Inca?
— Es el primer concierto de la gira. Reestrenaremos canciones del repertorio porque tenemos más temas de los que podemos tocar. Aún no sabemos si actuaremos 40 minutos o una hora porque hay otros grupos. Pero estarán todos los éxitos de Los Rebeldes, más otros temas que incorporaremos.

Siguen tocando las clásicas Mescalina, Mediterráneo, Bajo la luz de la luna...
— Lógicamente. Si voy a ver a los Rolling Stones, me gusta escuchar sus nuevas canciones, pero que toquen Satisfaction, que para eso voy a verlos.

En estos tiempos de conformismo, ¿qué les queda de rebeldes?
— Bastante. Seguir tocando rock’n’roll, tal y como está el patio, y sin que los medios ayuden, pues ya es mucho para una banda que destaca por su directo y sus nuevos temas. Nos encanta, además, ver a gente muy joven en las primeras filas, de tal forma que Mi generación, que no era de nuestras canciones más escuchadas, ya lo es. Lo que demuestra que no vamos por mal camino. Para que la gente separa que existe el rock tiene que vivirlo.

Tras años de dominio mundial del trap y reguetón en los festivales y discotecas, sobre todo en ambiente hispano, ¿el rock ya no interesa?
— El rock sí interesa. Los locales de ensayo están llenos de jóvenes que tocan muy bien. Hay chicos que vienen con sus padres a los conciertos y se enteran de que, aparte de lo que ponen las radios, hay otro tipo de música, como el rock. Porque el reguetón, lo siento mucho, es muy infantil, con letras tontas, con rimas fáciles, desagradablemente machistas y con un ritmo malo. El rock, flamenco o blues tienen muchos palos, pero el reguetón solo tiene uno: ‘Atún con pan, atún con pan, atún con pan...’.

Gana lo comercial...
— La gente tiene que conocer que hay otro tipo de música, con letras buenas y trabajadas, que cuentan historias. No es una caja de ritmos diciendo ‘atún con pan’, y un tío hablando de cosas ininteligibles sobre historias infantiles que dicen 'te quiero mucho, como la trucha al trucho', y no pasan de ahí.

«Tenemos la suerte de seguir sacando discos cada dos o tres años y de que el público se quede con los temas»

¿Es nostalgia o realmente los tiempos pasados fueron mejores?
— Los 80 me dan igual. Toco rock'n'roll. No tengo nada que ver con lo que hace Un pingüino en mi ascensor. Imagínate escuchar ahora en una radio fórmula a Loquillo, Rebeldes, Sabina, La Frontera o Bruce Springsteen. Vivimos una época en que todo es de rápido consumo. No creo que el reguetón, o las músicas que vienen y van, le vayan a cambiar la vida a nadie porque carecen de mensaje. Es simplemente: 'vamos a meter, vamos a empujar, tú qué buena que estás, y mañana nos volveremos a meter en la cama'. Hay que pensar en transmitir algo más profundo e interesante. Además, sobre el reguetón, quiero decir que cada uno se aburre como quiere.

¿Su gira se ha bautizado como Más sabe el diablo, ¿qué ha aprendido del mundo en general y del musical en particular desde 1979?
— Es un poco que todo lo sé, pero realmente no sé nada. Esa es la verdad. Cuando me preguntan cómo se hace una canción de éxito respondo que no lo sé porque nunca sabes qué le va a gustar al público. Porque vender música, entre comillas, es vender ilusión. Ahora, mientras voy aprendiendo, me lo estoy pasando de puta madre tocando la guitarra como un poseso y haciendo rock'n'roll.

¿Cuál es el secreto para seguir en el mundo de la música con estas ganas y fuerza tras 46 años de carrera musical?
— Las ganas de saltar al escenario, con una guitarra que pesa de narices y pegar saltos como un gañán y como si no hubiera un mañana. Tenemos la suerte de seguir sacando discos cada dos o tres años y de que el público se quede con dos o tres temas por álbum.

¿Qué le recomendaría a la gente joven que se junta para montar una banda?
— Que toquen mucho y que si tienen repertorio propio, que no se lo dejen tocar a nadie. Hay demasiados grupos de tributo y eso hace daño al rock. Si no surgen canciones nuevas, ¿a quién rendiremos tributo dentro de 30 años? Me gustan las versiones, pero sin temas originales, no habrían existido Héroes del Silencio, Rebeldes, Trogloditas ó Fito y los Fitipaldis.

¿Sobrasada o ensaimada?
— Ensaimada rellena de sobrasada. Y palo, herbes, rebentat de Marí Mayans, cassalla, flaó...

1 comentario

user Maribel Gonzalez | Hace 2 meses

👍👍👍

Lo más visto