«Hay que llegar a la verdad y la verdad ha triunfado». Estas palabras las ha pronunciado sor Natividad, presidenta de la federación jerónima, este viernes en el Monasterio de Santa Elisabet de Palma, conocido como Sant Jeroni, donde la comunidad religiosa ha celebrado la sentencia de la Audiencia Provincial de Palma que ha ratificado esta semana que la propiedad del convento es de las monjas jerónimas.
La justicia desestima así el recurso de apelación presentado por el Obispado de Mallorca, un pleito por la propiedad de Sant Jeroni que se prolonga desde hace diez años. Una lucha «dolorosa y que nos ha supuesto mucho sufrimiento», ha sostenido sor Natividad. Un impasse que, de hecho, está demorando los proyectos que las jerónimas tienen para el convento palmesano.
En este sentido, la letrada de las religiosas, Pilar Rosselló, ha avanzado que los planes de las monjas para Sant Jeroni pasan por tres puntos: devolver la vida religiosa al convento, «musealizar» la zona noble del mismo para darle un uso cultural, y por último, destinarlo a acciones «sociales y educativas». Pese a ello, ninguno de estos proyectos se podrá concretar hasta que termine este litigio. Eso sí, ha sentenciado sor Natividad, en ningún caso «aquí habrá un hotel» y, de hecho, contaron que han recibido ofertas de varios hoteleros.
Sobre ello, el Obispado de Mallorca estudia recurrir al Tribunal Supremo, un movimiento que, según la abogada de las monjas, no tendrá ningún recorrido, «no creo que se llegue a admitir a trámite». Ese paso prolongaría el pleito «al menos un año». De hecho, las monas piden que «no sigan adelante con esta situación tan dolorosa».