El conseller socialista Joan Ferrer, vocal del Patronat de la Fundació Teatre Principal, avisó el pasado 19 de diciembre que «seguramente» impugnarían las bases del concurso para el nuevo director gerente del centro público. Un anuncio que se produjo poco después de que la consellera de Cultura y vicepresidenta del Consell, Antònia Roca, informara a los medios de comunicación que los requisitos para presentarse al cargo estaban ya publicados en el BOIB desde esa misma mañana, algo que molestó especialmente a la oposición y al sector de las artes escénicas.
Ahora, el PSOE ya ha presentado y registrado en el Consell las alegaciones en contra de estas bases, puesto que «están mal hechas». Además, denuncian que Roca «ha estado firmando como directora gerente y no ha ejercido como tal, sino que lo han hecho, según nos explicaron, técnicos superiores de la Fundació. Sin embargo, hemos preguntado en repetidas ocasiones qué técnicos son esos y en qué condiciones se ha pactado y no nos han respondido, pues se trata de pactos privados y eso, dicen, sería vulnerar la Ley de Protección de Datos». Con todo, insisten en que «los miembros del Patronat deben poder acceder incluso a ese tipo de información».
Así las cosas, desde el Grup de Consellers Socialistes sospechan que las bases, que incluyen niveles muy bajos de inglés y catalán o valoran los estudios propios por encima de titulaciones oficiales, «se hayan redactado como un traje a medida de alguien».
Para más inri, señalan, las bases no contemplan un plazo para recurrir las propias bases. Desde la publicación en el BOIB se estableció un plazo de 30 días hábiles para que los candidatos se presenten. Por ello, desde la oposición piden que este proceso se pare, «se vuelva a atrás y se vuelvan a redactar las bases con un consenso real con el Patronat y el sector».