El entrenador de boxeo y expresentador del programa 'Hermano Mayor' Jero García tiene 53 años, cuatro hijos, 15 fracturas de nariz, TDAH y dos libros. El último, Cola de lagartija (Temas de hoy), lo presentará el próximo 29 de diciembre, a las 19.00 horas, en la librería Rata Córner de Palma.
Jero tiene aspecto de arponero, como escribe Pedro Simón en el prólogo de la novela que va dedicada, entre otros, a uno de sus mejores amigos, el periodista David Gistau, que falleció en 2020. «Se la debía», dice Jero por teléfono. Gistau se inspiró en él para construir uno de los personajes que aparecen en su libro Golpes bajos.
Cola de lagartija es una historia de superación personal ambientada en Madrid con dos protagonistas: Cola y Fernando. Los dos son Jero. «Me gusta decir que mi felicidad, con 50 palos, va directamente proporcionada a la capacidad de encaje que tengo, de soportar los dolores y los golpes». A Jero, antes que el ring, la vida le enseñó a recibir «las hostias».
La novela se gestó tras una de tantas, en la pandemia. «Tiene un poso educativo en cada página», asegura el entrenador y expresentador de televisión. «La mayoría de los conflictos se solucionan mejor hablando que con los puños», cuenta Jero, que discrepa de lo que canta Loquillo en Feo, fuerte y formal: «Para qué discutir si puedes pelear».
No es una novela de autoayuda. «Soy un poco contrario a todos estos libros, hay mucho paripé. No me gustan las tazas de Mr. Wonderful» (ríe). Jero dice que ha querido escribir los capítulos como golpes. «Y el lector, Cola o Fernando, van aguantándolos desde el principio hasta el final».