La artista serbia Marina Abramovic, una de las más importantes en el género de la performance en todo el mundo, inauguró ayer por la tarde su segunda exposición individual en Palma, Life, death, inbetween, que ocupa dos plantas en la galeríaHorrach Moyà de Plaça de la Drassana. La muestra, comisariada por Sydney Fishmann, quien también estuvo presente, se compone de varias piezas fotográficas y videográficas que hacen referencia a algunas de las intervenciones más importantes de la artista, como The Kitchen o Eight lessons of Emptiness with Happy End. A su vez, también se pueden ver algunas piezas inéditas y actuales de la creadora de acciones tan polémicas como Rhythm 0, entre otras.
La exposición, que podrá verse hasta el próximo 17 de noviembre, es solo una de las diferentes paradas que Abramovic realizará en su segunda visita a la Isla. Además de la muestra, la serbia participa en el Atlàntida MallorcaFilm Fest que arranca mañana con un visionado a las 22.00 horas en el patio de LaMisericòrdia de Las 7 muertes de MariaCallas, una ópera en vídeo creada por la propia Abramovic y en la que participa el actor Willem Dafoe.
Se trata de el resultado del interés que Abramovic ha sentido desde siempre en la figura de Callas, a quien escuchó por primera vez a través de la radio y que le hizo llorar. A su vez, el Atlàntida también proyectará Marina yUlay. Sin final previsto, documental de Kasper Bech Dyg sobre la relación entre los dos artistas.