El sector audiovisual de las Islas denunció este jueves en un comunicado que la consellera de Administracions Públiques, Isabel Castro, «ha decidido abandonar al sector y condenarlo al cierre al tomar la decisión de reducir el presupuesto real destinado a la producción de contenidos en IB3 en más de un 20 % respecto al año pasado».
Las asociaciones del sector audiovisual, APAIB, APAI, ACIB y CIMA se manifiestan «decepcionadas» tras la última reunión mantenida con la citada Conselleria y los responsables de IB3. Sus razones son «la confirmación de la disminución del presupuesto real destinado a la producción de contenidos en dos millones de euros, y las consecuencias que tendrá: cierre de productoras y cientos de trabajadores afectados».
Presupuesto
Las asociaciones lamentan, en este sentido, «la falta de compromiso de la consellera Castro en incrementar este presupuesto, ni con partidas extraordinarias, ni con el equilibrio procedente de otras partidas del presupuesto de IB3».
La consellera Castro «tampoco se comprometió a garantizar que, ante esta grave situación, el 100 por cien de presupuesto para contenidos se contratará con empresas locales». En este sentido, la gerente del Ente, Marga Cardona, confirmó que la televisión autonómica tiene previsto contratar «alrededor de un millón de euros con concursos a la productora de capital chino Mediapro».
El planteamiento de la dirección del Ente para este año es de parrilla continuista, lo que quiere decir que sólo se contratarán programas que ya son parte de la parrilla. Este hecho supondrá que sólo habrá presupuesto para cuatro nuevas convocatorias de programas.
Estas convocatorias suponen 300.000 euros, cantidad que las asociaciones consideran «totalmente insuficiente y que provocará que la mayor parte de las productoras no puedan trabajar».
Las asociaciones exigen ahora «la intervención urgente de la presidenta del Govern, Francina Armengol», así como «el incremento del presupuesto destinado a contenidos, al igual que se ha hecho con informativos, y el compromiso del Govern para que las productoras locales lleven a cabo el cien por cien de la programación, especialmente en estos momentos de crisis».
Decisión
Los representantes del audiovisual consideran que, «si el sector se hunde, habrá sido por una decisión del Govern, que con sus medidas o la falta de ellas habrá condenado este tejido productivo y sus trabajadores a la extinción».
Añaden que el Ejecutivo balear «no se puede quedar parado ante este hecho o será, finalmente, responsable de sus consecuencias tanto para las empresas como para los trabajadores y sus familias».