Después de seis días de cine, la octava edición del Evolution! Mallorca International Film Festival bajó este martes el telón por todo lo alto. La gala de clausura se celebró, por primera vez desde su existencia, en el Palacio de Congresos de Palma, cuya sala se quedó minúscula para recibir a tan numeroso público. De hecho, la propia directora del festival, Sandra Seeling, tuvo que organizar los asientos y mucha gente tuvo que quedarse de pie o sentarse en el suelo para presenciar la proyección de Pullman, la nueva película de Toni Bestard, uno de los cineastas mallorquines más reconocidos fuera de la Isla.
La cinta es un viaje iniciático de dos niños, Nadia (Alba Bonnín) y Daren (Keba Diedhou) al inicio del verano en los conocidos apartamentos Pullman, en Cala Major. El estreno fue muy celebrado por los asistentes, que aplaudieron las palabras de Bestard: «Es un filme hecho con mucho cariño a pesar de mostrar ciertas imágenes, a las que creo que no hay que dar la espalda, pues hay muchos que trabajan para tener esta Isla tan maravillosa».
A la proyección le siguió una larga lista de premios –15 categorías–, además de menciones especiales. Muchos premiados no pudieron asistir a la ceremonia, aunque algunos, como Richard Wong –mejor director por Come as you are– o Grant Rosenmeyer, mejor actor por la misma película, quienes celebraron su premio a través de un breve vídeo reproducido en la gala. La cinta Love cuts cosechó dos galardones más: mejor película y mejor actriz, por Kristina Jovanovic.
En el terreno balear, cineastas como Jaume Carrió, Joan Carles Bover o Victòria Morell, miembros de diferentes jurados, fueron los encargados de dar los premios al talento isleño. En este sentido, fueron galardonados Playboys, de la jovencísima Roxanne Paisan; Suitcase of madame Colette, de Joan Bonet; aunque también tuvo mención especial Ricard Peitx, por el cortometraje A-1606, producido por Nova Televisió (Grup Serra).
La fiesta continuó después de la entrega en la galería Gerhardt Braun.