Este viernes se estrena Climàtic 2.2. Càntic a les criatures, la última obra del compositor Miquel Àngel Aguiló, y la basílica de Sant Francesc se encuentra inmersa en todos los preparativos para el estreno de este espectáculo de música, luz, pensamiento y arquitectura.
Si hace diez años estrenó Climàtic en el Teatre Principal con un final pesimista, en esta ocasión ha querido aportar algo de luz. «Quería un final en positivo, para animar al público. Con una obra así, es posible sumarlo a un manifiesto, contribuir con un granito de arena más. Hay que salir de la zona de confort e incomodarme un poco para ser más sostenible», dice el compositor.
Más de 35 personas participarán en el espectáculo de este viernes, que arrancará a las 20.15 horas, entre los que habrá coros, un grupo de cuerda, un sintetizado, un loop station, dos cornettos (un instrumento renacentista recuperado hace poco) y un duduk, un instrumento armenio que corre a cargo del músico Tigram Alexanian, llegado directamente desde Londres para este concierto.
«Es un espectáculo de gran formato, con un montaje muy complejo en el que se amplifica instrumento por instrumento, voz por voz», dice Aguiló.
La propuesta del compositor mallorquín recoge las palabras de Sant Francesc de Asís. «El primer año de Vol_Art seguimos a Ramón Llull y este año, seguimos con San Francisco de Asís. No me interesa el catolicismo pero era un tipo avanzado a tu tiempo. Hoy, San Francisco de Asís sería un activista del Open Arms o de Greenpeace. Sería una Greta con hábito de fraile», señala el compositor.
Y es que el santo «hace referencia a los hermanos animales y los pone a su mismo nivel. Siente un respeto por el agua, el sol y todas las formas de vida», añade Aguiló, que precisamente ha escogido la basílica de Sant Francesc para este espectáculo ecomusical.
El objetivo de Climàtic 2.2. es concienciar a través de la música. «Tenemos una responsabilidad generacional. ¿Qué le vamos a dejar a nuestros hijos? Los políticos reaccionarán cuando el pueblo les empujamos», añadió.
«Un artista tiene que estar comprometido. Políticamente procuro mantenerme al margen. Es algo trivial comparado con el clima que nos afecta a la vida. El aire que respiramos, el agua que beben tus hijos... El clima se está convirtiendo en un tema político», explicó este miércoles el compositor.
Para completar este espectáculo, hace unos días se celebraron dos recogidas de residuos en la playa de Can Pere Antoni y en el causa de Sa Riera, a la altura de Puigpunyent. El espectáculo irá acompañado de imágenes de estas recogidas proyectadas en la basílica.
El diseño de luz corre a cargo de Andrés López y el artista plástico Pere Oliver ha diseñado el cartel que se inspira en los inicios de la industrialización, en el siglo XIX.
El chef Andreu Genestra también participó este miércoles en la presentación de este espectáculo aportando su gastronomía al encuentro. «Te conciencias cuando te tocan el bolsillo. Cada vez queda menos pescado y hasta a las setas les afecta el cambio climático», señala el chef.