Mallorca ha estado estrechamente ligada a la carrera profesional de Arturo Fernández, quien falleció este jueves a los 90 años, dejando atrás un legado que le convirtió en el galán por antonomasia del teatro y el cine español.
Ya en los años 60, el intérprete recaló en la Isla, en los desaparecidos cines Astoria, con motivo del estreno de su película titulada, precisamente, Bahía de Palma, que se rodó en tierras mallorquinas y que fue todo un boom en su momento, ya que este filme mostró el primer bikini del cine español, que se enfundó la legendaria actriz alemana Elke Sommer, quien se ganó el título de 'la chica del bikini'. Esta producción le trajo de nuevo a Palma, ya en el año 2000, con motivo de su reestreno.
Aún así, fue el teatro, sus espectáculos sobre las tablas, con los que Fernández acudió más a Mallorca en las últimas décadas, sobre todo al Auditòrium. Entre ellos, destacan éxitos como Esmoquín 2, en el año 2005; junto a Eva Serrano y Juncal Rivero representó Desconcierto, en 2007; Los hombres no mienten, en 2013, acompañado por Sonia Castelo y Carlos Manuel Díaz, o Enfrentados, más recientemente, en 2016, con David Boceta en el reparto.