El 30 de julio se cumplirá una década desde el atentado cometido por la banda terrorista ETA en Palmanova, que acabó con la vida de dos jóvenes guardias civiles, Diego Salvá Lezaun y Carlos Sáenz de Tejada, tras explotar una bomba lapa situada en los bajos de un coche patrulla. Este viernes, llegará a las salas de cine La Jaula, el quinto largometraje del director Marcos Cabotá (I am your father, Noctem o Amigos). La cinta salta así de la pequeña a la gran pantalla, ya que se estrenó en 2018 en IB3 Televisió en formato de miniserie de dos episodios.
Producido por Nova Televisió, La Jaula es un thriller psicológico inspirado en este suceso y, además, es el primer proyecto de IB3 Televisió que llega a salas comerciales de toda España: «Es la primera vez que un producto de la televisión de las Islas se estrena en el cine, un motivo para sentirnos orgullosos. Es un producto 100 % balear, además de un indicio de que la televisión y la ficción isleña están en un buen momento», afirmó Cabotá.
La Jaula es una historia de ficción que muestra las consecuencias del atentado en las vidas de los protagonistas, interpretados por la actriz Antonia Payeras, y los actores Xavi Núñez y Miguel Ángel Jiménez. Aún así, el filme tiene buena parte de documental. En su momento, Cabotá se entrevistó con altos cargos de la Benemérita y distintos agentes involucrados en la investigación, lo que le otorga una mirada realista a la cinta: «Los mallorquines pensábamos que vivíamos en una jaula dorada donde nada malo podía pasar. Tras la desgracia todos teníamos una pregunta en mente: ¿El comando sigue en la isla?. Siempre planteé la idea de investigar el caso, pues aun sigue abierto», detalló este martes el cineasta en la presentación del filme en la Sala Augusta.
Que la mitad de la película esté rodada en catalán no ha afectado a su distribución nacional, de la que se ha encargado la madrileña Begin Again Films; una noticia que Cabotá ha recibido «con alivio y satisfacción». Asimismo, los intérpretes reivindicaron el cine en versión original: «Cada vez estamos más acostumbrados a ver grandes películas, que llegan muy lejos y son bien acogidas, que están rodadas en las diferentes lenguas de España. Creo que estamos dando un paso más», declaró Antonia Payeras.
Aunque la película utiliza el mismo metraje que la miniserie, Gàbia, la narrativa varía en buena medida gracias al remontaje del material, y su proyección en cines amplia la experiencia de visionado, tal y como matizó Cabotá: «Soy un romántico de las salas de cine. No es lo mismo ver un producto de dos capítulos en televisión, que verlo de una tirada en el cine. Es una experiencia diferente», concluyó.