Los mallorquines Esther López y Joan Yago preparan el estreno del montaje Els ocells, que tendrá lugar el 7 de diciembre en la sala La Planeta de Girona, en el festival Temporada Alta. Los actores forman parte de La Calòrica, una de las compañías residentes de la temporada 2018-19 en la Sala Beckett de Barcelona, donde ensayan la obra. En la producción participa la también mallorquina Júlia Truyol, que en la actualidad actúa en la Kompañia Lliure del Teatre Lliure.
«Els ocells es una versión muy libre del clásico de Aristófanes, nos interesa entrar en el conflicto que hay entre los proyectos individuales y los intereses colectivos, un problema absolutamente contemporáneo», señaló Joan Yago, quien destacó que «hay un personaje con un objetivo muy claro, y que engaña a los demás». El actor contó que «es una obra sobre el mecanismo de los populismos, que surgen no únicamente por la intervención de una persona, también aparecen por la falta de resistencia que se encuentran».
Esther López comentó que «nuestra intención es plantear el problema, ponerlo sobre la mesa sin juzgar, intentando despertar conciencias sin ofrecer una solución clara». En escena, la actriz interpreta a cinco personajes. «El grupo de la Calòrica, compuesto por ocho personas, se caracteriza por explicar historias de una manera diferente, a través del humor que es la mejor manera de entender las cosas», asumió la intérprete, quien afirmó que «en cada montaje, hemos querido dar un paso hacia adelante, creando algo completamente diferente a lo anterior, sin repetirnos, recalculando nuestra ruta constantemente».
La Calòrica representará Fairfly en el Teatre Principal de Palma el 11 y el 12 de abril, espectáculo con el que la compañía sigue en la actualidad de gira, después de su creación en 2017, y que, en clave de comedia, trata de la irrupción de startups y de las paradojas de la llamada cultura del emprendedor. Fairfly ganó dos premios Max, al mejor espectáculo y autor revelación.
Serie
Joan Yago, guionista en Mai neva a Ciutat, de IB3TV, y Esther López, actriz en la misma producción, declararon que «mucha gente de Baleares se ha sentido interpelada con la serie, pero las líneas de la televisión y el teatro no se han cruzado, es un tipo de público diferente». De Mai neva a Ciutat, apuntaron que «habla de Palma, de unos lugares y nombres concretos, queríamos mostrar donde vivíamos sin hacer un producto exclusivo».