La decisión del Ministerio de Cultura de devolver a Sijena la colección de arte del Museu de Lleida cuando el pleito judicial aún no ha terminado, y con la Generalitat intervenida, ha abierto la caja de los truenos.
La formación valenciana Compromís ha exigido al Gobierno de Madrid que devuelva la Dama de Elche a su lugar de origen, así como otras obras de las capuchinas de Castellón. Compromís habla de acabar con el «expolio patrimonial».
De esta manera, se abre en Mallorca la posibilidad de reclamar que el Museo Arqueológico Nacional de Madrid (donde también está la Dama de Elche) devuelva a la Isla los tres toros de Costitx, joya de la cultura talayótica, descubiertos en la finca Son Corró de esta localidad en 1895.
El Gobierno de Madrid los compró a su propietario, Joan Vallespir, por 3.500 pesetas (21 euros) de la época. En las últimas décadas ha habido varios intentos para que el Estado devolviese estas joyas que datan de entre los siglos V y III antes de Cristo.
El Consell, cuando estaba presidido por Maria Antònia Munar, intentó que los toros regresasen para una exposición temporal. No fue posible.
En los años 80 también se intentó la devolución de la espada de Jaume I, depositada en Madrid. Tampoco se aceptó.
«Ilegalidad»
Como reclamación, Compromís ha llevado el asunto al Senado, donde ha registrado una serie de preguntas. Su portavoz, Carles Mulet, afirma que en 2012 un total de 52 bienes culturales fueron «hurtados» del convento de las capuchinas de Castellón y trasladados al monasterio de Barbastro (Huesca) con «la pasividad cómplice del PP». Respecto a la Dama de Elche (siglo III al V), afirman que se trata de patrimonio artístico valenciano «sacado ilegalmente» de su territorio.