La Cabeza de Augusto velado, una pieza del siglo I antes de Cristo, fue declarada Bien de Interés Cultural (BIC) el 10 de diciembre de 2015, un año y medio después de que este diario desvelara que su actual propietaria, Almudena de Padura y España, heredera de los marqueses de Campofranco, intentara sacarla a subasta en Christie's, con el consiguiente riesgo de que pudiera salir de España. Ahora, según varias fuentes, existen nuevos movimientos para una venta, que sería en España, ya que al estar protegido, el busto no se puede exportar, porque se consideraría expolio.
Según ha podido saber este periódico, hay indicios de que se podría cerrar una operación de venta de una obra capital de la historia balear, que podría interesar a más de un comprador, y alguno de ellos apunta a Catalunya.
Cabe recordar que, desde su catalogación como BIC, antes de proceder a la venta de la misma, su propietaria debe dirigirse a una administración pública para que, si tiene intención de adquirirla, pueda ejercer el derecho de tanteo y retracto. En el caso de Mallorca, sería el Consell Insular, que fue quien incoó el expediente de declaración de BIC.
Kika Coll, directora insular de Patrimoni, señaló este jueves que su departamento no ha sido contactado por la propiedad. «Pero si existen rumores de alguna operación de venta nosotros tenemos que proceder a controlar dónde está la pieza, cuál es su estado y cuáles son las intenciones de la propiedad porque nuestra obligación es proteger el bien».
Fue el Ministerio de Cultura quien paró la venta en subasta cuando Cristie's se dirigió al Museo Arqueológico Nacional de Madrid solicitando un informe para ponerla a la venta.
Historia
La Cabeza velada de Augusto, de mármol, fue hallada en el yacimiento romano de Pol·lèntia en el siglo XVI y representa al emperador cuando contaba unos 30 años. Sobre la misma existe abundante bibliografía, lo que no resultó suficiente para que en el pasado fuera protegida por la Administración balear o estatal.
Por ejemplo, en 2005, fue portada del catálogo de la exposición El mundo romano a les Illes Balears, que tuvo lugar en Caixafòrum en 2005, un buen momento para proceder a su catalogación, con lo que la propiedad hubiera tenido claro a qué atenerse.
Según documentación a la que accedió este diario, la pieza formaba parte de la colección de objetos que ocupaba la biblioteca de Can Pueyo, la residencia palmesana del marqués Joan Roten i Sureda.
Considerada una joya de la escultura romana en España desde hace varios siglos, debió llegar a los Campofranco en el siglo XVIII, y durante algunas centurias se creyó que representaba a Cecilio Metelo, el general que conquistó Mallorca para el imperio romano en el año 121 antes de Cristo.
Según explicó la historiadora del arte Catalina Cantarellas, fue otro historiador, García Bellido, quien en los años cincuenta del pasado siglo identificó definitivamente el busto como una representación de Augusto como la máxima autoridad religiosa, con la parte de detrás de la cabeza cubierta por un velo. Ya en el siglo XIX los estudiosos consideraban esta cabeza, que mide 38,5 x 18 cms, como una pieza importante del legado patrimonial de Mallorca y parece que en tiempo del emperador su finalidad era propagandística y honorífica. Augusto habría sido retratado en la época de la batalla de Actium, en Grecia, en el año 31 antes de Cristo. El final de su historia aún no se ha escrito.