«Denunciamos las malas prácticas de quienes han filtrado datos confidenciales a la prensa de informaciones sacadas de un contexto de cordialidad, con el supuesto fin de culpar al jurado y legitimar de esta manera que, frente a las críticas a la gestión municipal, el Ajuntament de Palma opte por elegir una persona a dedo para el cargo». Así concluye un comunicado vertido este jueves por el jurado que debía designar al director artístico del Casal Solleric y el Centre d'Art i Creació (CAC) de Ses Voltes para defenderse de las informaciones publicadas este jueves por Ultima Hora sobre un supuesto trato intimidatorio a una de las finalistas, y posterior ganadora, de este concurso público. De esta forma, los integrantes de esta comisión –Cristina Ros, Carles Gispert, Berta Sureda, Piedad Solans y Santiago Olmo– consideran como cordial frases como «acabarás colgada de un garrover» o «cuidado, que igual en tres meses estás en la calle».
Este grupo de profesionales del sector, además, rechaza «como manipuladora, falsa e insidiosa la acusación de cualquier tipo de presión, intimidación ni extorsión a ninguna de las candidatas o de haber forzado a la persona seleccionada a renunciar. Bien al contrario, fue unánimemente elegida con gran satisfacción del jurado, por su experiencia profesional y por estar altamente cualificada, como un bien para la ciudad de Palma». A pesar de esta afirmación, fuentes consultadas por Ultima Hora relataron este jueves que entre los miembros de esta comisión independiente hubo muchísima tensión y algunos de ellos señalaron a una única persona «que ha metido la pata» y, por tanto, responsable de expresar las citadas frases y de este supuesto trato de intimidación.
Por otra parte, sobre la puntuación de cero dada a la segunda finalista en la entrevista personal, Ros, Gispert, Sureda, Olmo y Solans argumentaron que «fue considerada no apta para el cargo por falta de experiencia profesional, traducida según el lenguaje que la normativa vigente permite». La otra candidata «fue considerada por unanimidad por el jurado como una profesional con una experiencia más que notable y unos criterios solventes e innovadores para dirigir estos centros». En este sentido, niegan tener nada que ver con su renuncia y acusan directamente a Cultura de Cort: «La directora general [Francisca Niell] fue quien comunicó la decisión a la persona elegida, además de responder a las dudas que la candidata tenía sobre los recursos con los que cuentan estos centros y sobre el proceso de disolución de la Fundació Palma Espais d'Art. Tras estas conversaciones telefónicas, la persona seleccionada le manifestó su renuncia».
Por su parte, desde la Regiduría de Cultura relatan una versión muy diferente de los hechos. «En estos momentos, asumir esta dirección supondrá encajar diferentes susceptibilidades». Este fue el principal argumento de la persona ganadora del concurso público a la hora de renunciar al cargo tras conocer el fallo del jurado. Así lo contó Francisca Neill, directora general, en respuesta a las acusaciones de esta comisión. «Cuando el jurado nos dio a conocer su decisión y la llamamos, ya estaba en al aeropuerto. Le dijimos que tenía todo nuestro apoyo, que deseábamos que aceptara, pero ya tenía la decisión tomada. Queremos remarcar que su trato siempre fue muy correcto y profesional; nos pidió disculpas».
Dada esta situación, como ya anunció el regidor Llorenç Carrió, se creará una dirección general para gestionar los espacios artísticos de Palma.