Un nuevo proyecto editorial está a punto de dar sus primeros pasos en la Isla. Unidos por una misma pasión, la literatura, y especialmente «la poesía», la filóloga Blanca Ballester, el diseñador gráfico Toni Bauzà, los poetas David Castelo y Máximo Fernández, y la gestora cultural Mar Rayó unen fuerzas para embarcarse en esta aventura que lleva por nombre Fahrenheit 450, un sello independiente que nace «por y para la cultura». El primer título de su catálogo es Santo Centauro, obra del propio Fernández, que se presentará el próximo viernes 31 de marzo, a las 19.00, en el espacio cultural Rata Corner (Hostals, 17, Palma), un acto en el que también se dará a conocer esta iniciativa.
Desde Fahrenheit 450 apuestan por «editar a autores noveles, pero también a los que tienen ya una larga trayectoria» y no descartan la posibilidad de ir más allá de la poesía, tanto en castellano como en catalán, y «publicar otro tipo de géneros. Según relatan los miembros de la editorial, «queremos formar trinchera en la resistencia, agazapados antes de caer en la luz. De ahí, la convicción y la defensa del concepto de Fahrenheit 450, un grado antes del 451, cerca de la eternidad».
Sobre la obra de Máximo Fernández, Santo Centauro, que inaugura Fahrenheit 450, «recoge el testimonio de las vivencias personales de los últimos años» de este poeta, con las señas de identidad que marcan sus versos: «Realismo, veracidad y crudeza». Bukowski, Dalton, Szymborska o Santöka son sus principales influencias.
En este segundo poemario, el autor de Palma habla «del amor, del dolor, de la soledad y de la realidad social», una poesía vivencial que aborda la cotidianidad del poeta, «un viaje emocional y poético», concluyen