Debemos suponer que una hora de retraso, para una diva, es poco. Por lo menos ese fue el tiempo que Gloria Gaynor (Nueva Jersey, Estados Unidos, 1949) hizo esperar este sábado a la prensa en su comparecencia previa al concierto que ofreció por la noche en Port Adriano. La cantante se disculpó por la tardanza, que achacó al cansancio ocasionado por un retraso en el vuelo. La voz de I will survive recaló en la Isla para protagonizar una velada basada en todos los himnos que la han convertido en una leyenda de las pistas de baile.
«Vine a actuar en Mallorca hace tres o cuatro años y es evidente lo precioso que es este lugar», recordó Gaynor. «El éxito de I will survive ensombreció el resto de mi repertorio, y hace años eso era algo que me molestaba mucho porque pensaba que me robaba la oportunidad de que la gente me conociera por otras cosas. Ahora creo que esa canción es mi propósito, con ella le doy fuerza y ánimos a gente de todo el mundo, especialmente a las mujeres», afirmó.
Gaynor también opinó sobre las figuras que dominan el panorama musical actual, como Beyoncé o Rihanna. «La gente joven está plasmando en la música todo aquello que viven en su día a día, la realidad de sus vidas, por eso la gente conecta con ellos. La música siempre ha tenido y tendrá la capacidad de ayudar a las personas», señaló. A la pregunta de si le gustaría colaborar con alguna de ellas, no obstante, la cantante sorprendió con otro nombre: «Justin Timberlake». Sobre política, sin embargo, no se mostró muy dispuesta a conversar: «Trato de no pensar demasiado en Donald Trump», sentenció únicamente.
Antes de volver a su habitación, Gaynor fue obsequiada con una caricatura de Bibi que publicó el diario en lengua inglesa Majorca Daily Bulletin.