Hace unos días, Concha Velasco estaba en una sala de cine viendo la nueva película de Meryl Streep, a la que considera «una monstrua». «Sabe hacer papeles de señora mayor», argumenta con admiración sobre la mujer con más nominaciones a los Oscar de la historia. Muchos dirían que no tiene nada que envidiarle, puesto que ella misma es la actriz más premiada de nuestro país, pero la pucelana se muestra humilde y elegante durante toda la conversación.
Su voz suena jovial al otro lado del teléfono y casi se puede percibir su sonrisa al expresar las ganas que tiene de estar en Palma. «Ya sabes que siempre he veraneado en Formentor, pero hace dos años que no puedo ir, ¡así que lo primero que voy a hacer al llegar es ir ahí!», sentencia.
Viene a Ciutat para presentar Olivia y Eugenio, una función que habla de «amor, sacrificio y felicidad». El montaje se podrá ver en el Auditòrium de Palma, los días 5 y 6 de septiembre, a las 19.00 horas. En Olivia y Eugenio, Velasco interpreta a la madre de un joven con síndrome de Down que debe enfrentarse a una compleja situación familiar. «Es un texto duro, sobre todo al principio, quizá uno de los trabajos de preparación más difíciles que he hecho en mi carrera», desvela. Su coprotagonista está interpretado por dos actores con esta patología, que se turnan semana tras semana, «no porque no sean capaces de afrontarlo, sino porque tienen otros trabajos», explica.
A pesar de haber tenido que enfrentarse a serios problemas de salud, la actriz es rotunda cuando se le pregunta si se toma el trabajo con más calma: «¡Qué va! Eso va en contra de mi manera de pensar. Grabo Cine de barrio los lunes, Bajo Sospecha los martes y el resto de días estoy con Olivia y Eugenio. Lo que sí hago es cuidarme mucho la voz, para no quedarme afónica.
Se define a sí misma como una «actriz vocacional», que «va a por lo que quiere». «Soy de las que llaman a los directores para decirles que quiero participar en sus obras. Me pedí Olivia y Eugenia y me he pedido hacer un monólogo de Juana la Loca en 2016. En cine es un poco más difícil, porque no le puedo pedir a Álex de la Iglesia que me coja para su película cuando ya le ha dado el papel a Carmen Maura», admite.