Una despedida con «delicioso» son cubano y una «explosión de frescura». Estos serán los principales ingredientes del concierto que este jueves ofrecerá en Port Adriano, a las 22.00, la veterana orquesta cubana Buena Vista Social Club, una cita que se incluye dentro del Adiós Tour, el último en el que se embarcará el conjunto. La música y el baile corre por las venas de su veintena de miembros –número que ha ido variando a lo largo de más de cuarenta años, desde su fundación en el año 1966– «desde que éramos muy pequeñitos», confiesa la encargada de poner las voces a su repertorio, Omara Portuondo, toda una leyenda. ¿Su secreto? «Llevar la música tradicional cubana por todo el mundo con alegría y fogosidad», prosiguen Barbarito Torres y Manuel ‘Guajiro' Mirabal, un tanto más tímidos que su compañera de fiesta.
Torres avanza que para esta gira, la última, «aunque nosotros, en realidad, solo pensamos en el ahora», han preparado un repertorio basado en «música puramente tradicional y nuevas composiciones», aunque haciendo especial hincapié en «nuestras canciones más icónicas», como, por citar algunas, Veinte años, Dos gardenias, El carretero o Silencio.
En su propuesta escénica también habrá espacio para el recuerdo y la nostalgia, «gracias a las proyecciones podemos cantar y tocar juntos a antiguos compañeros», entre ellos, el maestro y «mítico» Compay Segundo, fallecido hace ahora doce años, en 2003. «Lo seguimos llevando con nosotros en el corazón, es el mejor músico», añade Omara Portuondo.
En Cuba, el pasado marzo, comenzó un cambio tras restablecer las relaciones diplomáticas, acontecimiento que está siendo un tanto ajena para los miembros de Buena Vista Social Club. «Llevamos más de un mes y medio fuera de Cuba, pero ya era hora de que se retomasen las relaciones con Estados Unidos», considera Barbarito Torres. Por su parte, Omara Portuondo celebró «la amistad» entre los dos países, que es «una de las cosas más importantes de los humanos».