El belén de La Sang «es la joya de la corona del Consell y necesita estar lo más perfectamente posible para que pueda ser disfrutado por todos». Lo dice Miquel Barceló, secretario general técnico de Presidencia, quien supervisa personalmente los trabajos de restauración de este conjunto patrimonial, Bien de Interés Cultural (BIC), del que Letizia Arbeteta, un autoridad en la investigación belenística, ya señalaba a este diario en 2010 que «posiblemente sea el más antiguo de la cristiandad en uso».
Datado en el siglo XV, el belén de La Sang gozará de una restauración iniciada hace un año y que cuenta con el apoyo del Instituto de Patrimonio Cultural, del Ministerio de Cultura, que se «hará cargo de la redacción del proyecto de rehabilitación y de su ejecución», apunta Barceló. El Consell, mediante la brigada de Patrimonio, se encargará de la intervención en el suelo y paredes de la capilla-cueva que lo acoge.
Barceló dice que el trabajo se hará «sin prisas» para que salga bien. «Una vez que se ha empezado, no importa si tardamos dos años o tres». Cuando le preguntamos por qué se decidió acometer ahora la restauración, responde: «Ha cambiado la sensibilidad, es otra, ha sido una decisión política».