El Palau de Aiamans y sus jardines dejarán de ser Bien de Interés Cultural (BIC), con categoría de monumento, después de que los técnicos de Patrimoni del Consell dieran el visto bueno a la propuesta del Ajuntament de Lloseta de rebajar esta protección para compatibilizarlo "con la implantación de usos turísticos".
La declaración de BIC de Aiamans tuvo lugar en 1992, antes de la actual normativa de Patrimonio, y se justifica la modificación del a protección en que entonces "era la única figura posible de protección". También en que "el arquitecto Gabriel Alomar realizó un proyecto y que se eliminó o transformó casi la totalidad de la antigua edificación".
En una visita técnica también se ha constatado que "los interiores han sido modificados y que no tienen un valor patrimonial que les haga merecedor de esta protección". Así, la Comissió de Patrimoni autorizó ayer que se inicien los trámites para dejar sin efecto la declaración de BIC e incoar el expediente de declaración de Bien Catalogado. Hay un plazo de un año para adoptar el acuerdo de declaración y mientras se produce Aiamans seguirá protegido como BIC.
Por otra parte, en la reunión técnica se dio el visto bueno con prescripciones a la instalación de la estatua del Rei Jaume II en la plaça del Fossar de Sineu. El expediente se resuelve después de unos años de polémica por su ubicación. La obra es del escultor Ricardo Aparicio Gago. También se aprobó la creación de un edificio café-concierto y zona de uso polivalente en s'Estació del mismo municipio.