«Mariano Benlliure viajó a Palma, vio el lugar y creó el monumento a Antoni Maura para ese espacio concreto, a escala, por eso estamos en contra de que se mueva de allí; la caída de la estatua es la excusa perfecta para darle otro uso a la plaza».
Lo decía este viernes desde Madrid la bisnieta del escultor, Lucrecia Enseñat, de origen mallorquín , directora y vicepresidenta de la Fundación Mariano Benlliure, que guarda el legado del artista.
Enseñat lleva dos años intentado que el Ajuntament de Palma adecente el entorno de este conjunto escultórico ubicado en la Plaça del Mercat. Inaugurado en 1929 con presencia del artista y construido por suscripción popular, en la noche del pasado martes sufrió los efectos del temporal.
Una rama del ficus que le da sombra se rompió y en su caída arrastró hasta el suelo la figura en bronce de Maura, quien fuera presidente del Gobierno.
Tras dicho accidente, el Consistorio ha tomado la decisión de trasladar el monumento a otro lugar.