La duodécima edición de la FIET, la Fira de Teatre Infantil i Juvenil de les Illes Balears, finalizó después de que un gran número de personas hubieran llenado el teatro, el colegio, el polideportivo y otros recintos de Vilafranca de Bonany. Algunas de las obras habían agotado las entradas hacía días, mientras que otras estaban cerca de hacerlo.
En sus casi un centenar de funciones, la feria ha reunido a una treintena de formaciones de diferentes procedencias, siendo ésta la más internacional hasta el momento. «Hemos dado un paso importante tanto en calidad como en cantidad. Al ser la duodécima edición nos hemos ganado cierto renombre, así que es más fácil conseguir que vengan compañías», asegura Jaume Gomila, presidente de Sa Xerxa, ente organizador.
Protegidos del sol por una carpa, las compañías de teatro y los programadores celebraron su trabajo con una comida a la que asistieron representantes de las entidades que financian el evento. Entre ellos, Joan Rotger, vicepresidente del Consell de Mallorca, quien remarcó que el Consell considera la FIET «un proyecto imprescindible para la propuesta escénica de Mallorca. Es por eso que colaboramos con 35.000 euros, porque creemos que es esencial en el programa cultural de la Isla.