La expectación era máxima ayer en el restaurante Bahía Mediterráneo, en el Passeig Marítim de Palma. ¿La razón? El ya exdirector titular y artístico de la Orquestra Simfònica de Balears, Josep Vicent, convocó a los medios de comunicación para ofrecer sus primeras declaraciones públicas sobre su despido fulminante, que tuvo lugar el pasado miércoles.
El maestro, emocionado en ocasiones, y enfadado e indignado en otras, cargó sobre todo contra el gerente de la orquesta, Marcelino Minaya. Pero también contra el Consorci -«No he visto ni a Bauzá ni a Camps en un concierto de la orquesta». Relató en primera persona cómo se han sucedido todos estos acontecimientos.
«Pido disculpas por toda esta parafernalia, llevo tres días sin dormir». Así comenzó su comparecencia un visiblemente emocionado Josep Vicent. Antes de tomar asiento, músicos de la orquesta, aficionados -entre ellos el artista Joan Bennàssar, con quien colaboró en el concierto El Cant de la Terra - o políticos como Antoni Noguera, de Més, le recibieron entre aplausos a la entrada del restaurante, y el maestro no pudo evitar las lágrimas.
Tras hacer un repaso de su trayectoria profesional y recordar cómo llegó hasta la dirección de la Simfònica, Vicent comenzó a lanzar sus dardos contra la gerencia y el Consorci, entidad a la que se refirió como la 'Casa Grande', pero antes dejó claro que «no estoy haciendo estoy por venganza». En referencia a su entrada a la orquesta y la salida de su anterior titular, Salvador Brotons, dijo que «no le conocí [a Brotons], y sé que me atacó; ahora lo entiendo e imagino que sería así porque se sintió como yo, ninguneado y maltratado». «Yo le dije a Marcelino [Minaya] que las cosas no se hacían así y él me dijo 'he situado a Brotons donde yo quería'. Se dedica las veinticuatro horas del día a colocar a la gente donde él quiere». En su caso, «han esperado a que termine la temporada y Bellver, y a que los músicos se vayan de vacaciones».
En este sentido, el portavoz del comité de empresa de la orquesta, Nigel Walker, dejó caer que habrá acciones cuando vuelvan de su descanso en septiembre: «El gerente continuará con su gestión, y nosotros también». La palabra huelga sobrevolaba por la sala, y uno de los músicos, que prefirió no desvelar su nombre, dijo que «podría pasar».
Un acuerdo de patrocinio de Coca-Cola, otro con DKV, «a todo me dijeron que no, me lo echaban para atrás, y siempre con la misma excusa, que no hay dinero. Ahora lo entiendo todo, llevan mucho tiempo preparando esto», remató. Ahora «me siento muy triste porque la conexión que tenía con los músicos, que suenan de manera extraordinaria, era casi religiosa...».
Experiencia
Según el maestro, el gerente de la Simfònica «es un señor sin experiencia y juega con cuatro millones de euros... ¿Cómo lo podemos permitir? Este señor es maquiavélico». Vicent se quedó «sin palabras» y desde entonces «he recibido más de tres mil mensajes» de apoyo y ánimo. También criticó una «nefasta» gestión: «La pasada temporada se presentó el mismo día del primer concierto, cero publicidad, no hay página web...».
Sobre el nuevo proyecto para la orquesta, que dirigirán los maestros Joji Hattori y Pablo Mielgo, Vicent expresó: «Dicen que quieren internacionalizar la orquesta, pero a mí ni siquiera me dejaron ir a Manacor». Sobre el sueldo que se repartirán estos, el mismo que cobraba Vicent, «supongo que les dará para comprar leche», sentenció, irónico.