El concierto del verano está en el aire. La actuación en Son Moix de David Guetta, prevista para el 2 de agosto, corre peligro de suspenderse debido a las divergencias surgidas durante los últimos días entre el Real Mallorca y XLRmusic, promotora de un espectáculo que esperaba congregar a unas veinte mil personas. El club balear, que exige garantías de reparación sobre los posibles daños que sufriría el césped del estadio, manifestó su incredulidad ante el anuncio de la presencia de Guetta en Palma cuando las negociaciones todavía no están cerradas.
Los técnicos del Mallorca han elaborado un informe en el que se incide en la necesidad de tomar medidas preventivas para proteger el césped y sólo tener que replantar mediante tepe en rollo la mínima superficie posible. Según ha podido saber este diario, el club ha calculado unos gastos de 150.000 euros para que el terreno de juego de Son Moix presente su aspecto habitual después de la celebración del concierto, una cantidad muy superior a los 75.000 euros que ha ofrecido la empresa promotora. Por el concierto de Elton John, celebrado en septiembre de 2010, el Mallorca percibió 275.000 euros.
Presidente
Gabriel Cerdà Alemany, presidente de la entidad bermellona, expresó ayer su sorpresa ante la actitud adoptada por los promotores, que días atrás confirmaron el evento. «Hemos visto una cosa que nos ha extrañado, porque desde Madrid se da por seguro que el concierto se hará aquí [Son Moix]. Es cierto que estamos negociando con el promotor y que intercambiamos contratos para ver si llegamos a un acuerdo, pero no hay nada cerrado».
Cerdà añadió que «si se están vendiendo entradas es una ligereza, algo ilógico que no debería hacerse porque aquí no se ha aprobado nada. Y luego hay que pedir permiso a Cort, que debe autorizarlo. No es adecuado lo que están haciendo. Si el concierto se hace en el estadio pediríamos garantías suficientes para que se cambie la hierba si se produce algún desperfecto. Se hace rápido, aunque es muy costoso».
Por su parte, Javier Jiménez, asesor jurídico de XLRmusic, confirmó ayer a este diario que «el contrato no se ha firmado aún, hay un acuerdo y se están ultimando los detalles».
Según Jiménez «es natural que el Club quiera todas las garantías y los abogados de ambos están utimando flecos». Jiménez apuntó que «nuestra voluntad es aceptar las condiciones [del Mallorca] como hemos hecho siempre, ayudar en todo, facilitar los temas de seguridad, mantenimiento, queremos que el Mallorca quede encantado».
De momento, aunque a la hora de cerrar esta página no se había firmado el contrato, las entradas ya están a la venta en Internet. Según Jiménez, «la empresa tiene derecho legítimo» a sacarlas porque «habrá concierto en Palma».