Los historiadores Jaume Llabrés y Aina Pascual han elaborado un amplio inventario histórico-artístico de las Casas Santas de las iglesias del centro de Palma que les ha permitido documentar algunas urnas eucarísticas o monumentos desconocidos, principalmente porque desde la década de los años cincuenta la tradición se fue «simplificando». Así, gracias a esta investigación, se han fotografiado y estudiado, entre otras, «la mesa de altar de madera ebanizada y dorada de principios del XVIII sobre la que se depositaba la urna del Convent de Santa Magdalena» o la gran pieza de Sant Francesc, que ya no se expone.
El inventario partió de un encargo del Ajuntament de Palma a Donald G. Murray para fotografiar las piezas de cara a la elaboración de un folleto, en el que se incluiría un pequeño estudio artístico. Finalmente, Cort elaboró ese documento a partir de otro material, pero Llabrés y Pascual esperan reunir su trabajo en una publicación dedicada al conjunto del mobiliario de las Casas Santas, «una escenografía marcada por el cambio socioeconómico», comenta Aina Pascual, quien valora que la tradición ha ido resurgiendo y que el punto de partida fue la exposición que Gabriel Llompart CR y Joana Maria Palou, Eucharistia. Art eucarístic , presentaron en sa Llonja en 1993. «En el momento es que se pone en valor, crece el interés y hoy se pueden seguir viendo montajes espectaculares», apuntan. Los historiadores recuerdan que antiguamente las Casas Santas se situaban en el presbiterio, y que se concedía total protagonismo a la pieza cubriendo los retablos, y en algunos casos todo el templo, con grandes damascos o telas moradas.