Desde hace un par de años el bailarín y coreógrafo Juan Carlos Sánchez (Palma, 1984) reparte su residencia entre Madrid y París, y los próximos dos meses los pasará recorriendo Rusia con el espectáculo Passion and dance. Paralelamente, el artista intenta traer a Palma su proyecto Larmes , un pieza que estrenó en 2013 en el Theatre Clavel de París con su compañía Flamenco Rubio.
Sánchez reconoce que «es complicado para los artistas mallorquines que hemos tenido que salir fuera para continuar con nuestra formación y nuestra carrera traer proyectos a la Isla». El bailarín de danza española y flamenco lamenta que «en Rusia se va a poder mi trabajo y en Palma, de momento, no es posible». Ha llamado a varias puertas para subir al escenario una propuesta «autobiográfica» que fusiona «flamenco y jazz» y que está «inspirada en diferentes situaciones que he vivido en París», donde ha participado en el programa televisivo La France a un incroyable talent .
Principal
«No he encontrado un teatro en el que poder desarrolla proyectos. Me gustaría llevar al Teatre Principal mi producción, porque de pequeño actúe allí, pero me han dicho que ellos suelen programar clásico y contemporáneo», cuenta este joven bailarín que se graduó en Danza Española en el Real Conservatorio Profesional de Danza, en Madrid, y que ha trabajado en las compañías de José Greco, Aída Gómez, Europa Dance o Suite Española. Su profesión le ha llevado a pisar escenarios de Grecia, Japón, Tailandia, Turquía, Colombia, México o Filipinas y, recientemente, ha subido al escenario del Folies Bergere de París con Zorro , un espectáculo coreografiado por Rafael Amargo y dirigido por Christopher Renshaw.
La pieza que espera traer a Palma, Larmes, está interpretada por cinco bailarines y varias de sus coreografías han sido seleccionadas por el productor Ruslan Nurtdinov para formar parte de un proyecto que también acoge a solistas de clásico y que estará en cartel del 23 de febrero al 17 de abril en San Petersburgo, Kazan o Ufá.