El Teatre Principal de Palma rebosaba anoche con motivo del primer concierto de despedida del mayor exponente del rock catalán made in Mallorca: Antònia Font. Ya lo avisaron sus más fieles seguidores hace una semana, cuando agotaron las localidades del recital de ayer en menos de dos horas. Esta cita fue tan sólo la primera de su adiós a los escenarios, ya que repetirán actuación hoy y mañana, con un repertorio en el que repasan sus éxitos durante casi tres horas de música.
El ambiente que trasmitía el espacio escénico era de fervor, muy festivo y alegre, se palpaban las ganas pasarlo en grande, aunque con una sensación un tanto agridulce, ya que, posiblemente, la de ayer fue la última vez que los allí presentes podrán ver en directo a sus ídolos. Entre el público, gente de todas las edades, desde adolescentes, adultos o familias, unos asistentes que corearon muchas de las canciones con las que la banda pone punto y final a una trayectoria basada en una decena de discos, en los que han caminado por terrenos como el pop, el folk o el rock.
Los seguidores de Joan Miquel Oliver, Pau y Pere Manel Debon, Jaume Manresa y Joan Roca les recibieron con una gran ovación antes de iniciar la velada, que abrieron con Ballarines de ballet -de su último y exitoso LP, Vostè és aquí -, Camins de plàstic y Tokio m'és igual . Le siguieron conocidos hits de la banda como Alegria , Me sobren paraules , Viure sense tu o Wa Yeah! , esta última muy coreada por los fans.
La última aventura de Antònia Font continuará esta noche y mañana sábado en el Principal, cuando su adiós será definitivo.