Con menos participación que otros años pero con fidelidad a uno de los rincones de Mallorca preferido por los paisajistas –el Barranc de Biniaraix–, se celebró ayer en Sóller la primera jornada de una nueva edición de la Trobada Internacional de Pinto, organizada por la asociación Art Viu y coordinada por los artistas José María Munar y Joan Cunill.
Unos cuarenta pintores –tanto aficionados como profesionales– se esperaba que participaran durante todo el fin de semana realizando sus obras en cualquier punto incluido dentro del perímetro del certamen, que tenía su epicentro en el famoso Barranc de la Serra de Tramuntana.
La luz inundaba ayer los paisajes sollerics, pero el calor hizo que la mayoría de los participantes buscaran las zonas de más sombra, desde las calles empedradas de Biniaraix hasta el inicio del famoso camino. Más bien pocos artistas escogieron zonas elevadas.
Algunos de los participantes aseguraban que la crisis también ha hecho que muchos de los incondicionales se hayan planteado este año tomar parte en el evento: «No es que los materiales sean muy caros, pero entre pinceles, telas, tubos, acuarelas y el desplazamiento, algunos se lo piensan dos veces», afirmaba uno de ellos.
Entre los motivos escogidos por los artistas abundaban las vistas generales de Biniaraix, con su característico campanario blanco, mientras que otros optaban por los motivos naturales y vistas del siempre impresionante barranco, aunque este año ya sin el encanto añadido del agua corriendo por su torrente.
Hoy continuará la trobada hasta media tarde, cuando los artistas participantes expondrán los trabajos que consideren terminados en la plaza de Sóller. Esta edición ha contado con el apoyo del Grup Serra.