El recuerdo del maestro Ekitay Ahn (Pyongyan, 1906 - Mallorca, 1965), primer director de la Simfònica de Balears, sigue vivo en la memoria de los melómanos de su país natal, Corea, y también en Europa, como demuestra el homenaje que acaba de recibir en Budapest. Allí, según cuenta su hija Leonor Ahn, invitada al evento, se inauguró un busto en su memoria en el Parque de los Héroes, junto a una placa en la que se destacan fechas claves de su carrera y, entre ellas, la de su llegada a la Isla, en 1946, para crear la que fue la primera orquesta sinfónica del Archipiélago, germen de la actual.
«Fue muy emocionante ver el nombre de Mallorca grabado en aquellas piedras de granito», recuerda Leonor, quien también destaca los conciertos a los que asistió el 10 y 11 de mayo en Budapest, con los que se celebraba al músico que trajo a Mallorca los vientos internacionales y cosmopolitas de la música clásica, no en vano había sido alumno predilecto de Richard Strauss (1864- 1949), quien, a sus ochenta años, estuvo a punto de viajar a Mallorca para visitar a su amigo y discípulo. Andrea Szegö, directora de la Asociación Húngara-Coreana, fue la promotora del los actos, a los que asistieron primeras autoridades de ambos países. Cabe recordar que Ahn había estudiado en Viena, pero también en Budapest en un colegio de virtuosos, de ahí que el homenaje se convocara bajo el lema E kitay Ahn en Budapest y sus maestros Kodaly y Béla Bártok , todos ya figuras de la historia de la música.