El cuerpo humano, probablemente la máquina más perfecta, centra la obra del pintor Tià Zanoguera (Palma, 1973), quien utiliza «la pintura como metáfora de la carne». La galería Joan Oliver ‘Maneu' de Palma acogerá hoy, a las 20.00, la inauguración de una exposición del artista que recoge su «obsesión» por el cuerpo.
La pincelada, «que habla del control», y la mancha, «que define su ausencia», precisan la técnica de Zanoguera, quien muestra en Ciutat sus cuadros más recientes, además de recuperar algunos lienzos «importantes». «La pincelada determina el control mientras dibujas», explica el artista, «pero la mancha es caótica. Sin embargo, una no es tan controlada como se cree, y la otra no es tan libre como parece».
El pintor alemán Lucian Freud, fallecido el pasado año, es uno de los «maestros e inspiraciones» de Zanoguera, por lo que también le ha hecho un homenaje. «Lo más curioso de la exposición», revela el pintor, «son unas obras que son versiones de otras de Freud. Empecé copiando su lienzo y lo fui transformando. Por ejemplo, comencé dibujando a su madre y terminé mezclándola con la mía».
Otra de las «novedades» que se podrá ver en la galería ‘Maneu' es una animación. Marc Capdevila, montador y editor de cine, ha animado algunos dibujos que forman parte de un cómic, proyecto que Zanoguera tiene con el poeta Albert Balasch.
Exposición Tià Zanoguera.
Hoy, a las 20.00, en la galería Joan Oliver ‘Maneu' de Palma (Montcades, 2). Hasta el 18 de junio.