Las redes sociales nunca habían servido de promoción a un artista con resultados tan espectaculares como en el caso del cantante y músico Pablo Alborán (Málaga, 1989). Bisnieto del primer marqués de Alborán, el vocalista saltó a la fama a raíz de la arrolladora acogida de uno de sus vídeos caseros en Youtube, causando un revuelo que se tradujo en el lanzamiento de su primer disco homónimo, un trabajo que acumula ya cuatro discos de platino y que Alborán presentó ayer en el Auditòrium de Palma ante una legión de fans, que agotaron las localidades para sus dos conciertos en Ciutat en pocas horas.
Con diez minutos de retraso, como bien manda la tradición, este ídolo de masas saltó al escenario enfundado con su inseparable guitarra, ésa que le ha acompañado desde siempre, para interpretar uno de sus temas más sentidos, Desencuentro . Muy a la moda, y casual, con pantalón verde y camiseta gris, el cantante saludó a sus seguidores de la Isla, a quienes enamoró con cada una de sus miradas, unos ojos claros que encandilaron al público de manera fulminante. Entonces, presentó a todos y cada uno de los músicos de su banda antes de arrancar con un repertorio plagado de hits , como los muy coreados Perdóname o Miedo , uno de sus mayores éxitos junto a Solamente tú , un himno en la red.
Pese a que su publico es mayoritariamente femenino, lo cierto es que el arco de edad es amplísimo, nadie se escapa de la voz y de la garra de este cantante que no defrauda. La música de Alborán estuvo acompañada de muchos gritos, que no cesaron durante toda la velada. Las más jóvenes le decían calificativos como «guapo» sin cesar, las fans pedían más y más. Además, los más fieles demostraron que conocen al dedillo todas y cada una de las canciones del malagueño.
Estaba previsto que el concierto, que resultó muy intimista y en clave acústica, finalizase cerca de la medianoche, aunque su periplo mallorquín no termina aquí. Esta noche, a las 22.00 horas, Alborán repetirá, y seguro que más de una seguidora, también.