Un grupo de investigadores del Rijksmuseum de Amsterdam ha sacado a la luz un supuesto retrato de Goya oculto debajo de la pintura «Retrato de Don Ramón Satué», que representa a un general napoleónico, informó hoy a Efe uno de los expertos.
El retrato, descubierto gracias a una innovadora tecnología de rayos X, es «casi con toda probabilidad» el de un alto cargo militar que acompañó a José Bonaparte en su llegada a España como rey, según explicó el comisario de Arte Internacional del centro, Duncan Bull, en una entrevista telefónica.
El escaneado de la primera capa de pintura del cuadro mostró a un personaje ataviado con las insignias de mayor rango de una orden de caballería instituida por José Bonaparte, lo que hizo creer a los expertos que podría tratarse del propio monarca.
Esta primera hipótesis se descartó al comprobar que la pose era «demasiado informal» y no contaba con la iconografía característica de los retratos del imperio napoleónico, según Bull.
Los expertos apuntan a dos altos cargos militares originarios del antiguo Reino de Nápoles, uno de los cuales conoció en persona a Goya durante su estancia en España, según algunos documentos históricos.
«Nunca podremos decir a ciencia cierta de quién se trataba, pero reducir el elenco a unas pocas personas ya es bastante», afirmó el responsable de arte internacional del Rijksmuseum, quien contó con la cooperación del Museo del Prado para realizar la investigación.
Bull da por hecho que la autoría del retrato corresponde a Goya, ya que según dijo, el pintor español «no solía reciclar lienzos ajenos para realizar sus obras».
El primer retrato podría estar datado entre 1809 y 1813, es decir, una década antes de que Goya pintara encima el «Retrato de Don Ramón Satué», la única de sus pinturas que se encuentra actualmente en Holanda.
Los expertos creen que el retrato quedó en manos de Goya después de la ocupación francesa en 1813, quien entonces podría haber decidido ocultarlo con otra pintura para evitar posibles represalias por parte del régimen absolutista de Fernando VII.
El lienzo se encuentra actualmente en el museo Boijmans Van Beuningen de Rotterdam, y regresará al Rijksmuseum en 2013.
La imagen del retrato oculto obtenida con rayos X puede verse en la página web del Rijksmuseum, que publicará próximamente un extenso artículo con todos los detalles del hallazgo.
La tecnología empleada para descubrir la obra fue desarrollada de forma conjunta por la Universidad de Amberes (Bélgica) y la Universidad de Delft (Holanda), y se trata de la primera ocasión en que se aplica a un lienzo, según Bull.