«Hacía mucho tiempo que no me reencontraba con el público de la Isla», confesó Antonio Carmona al finalizar la primera canción del concierto que ofreció la noche del pasado sábado en Ses Voltes de Palma. La fiesta comenzó con el tema Uno, dos y tres, pasadas las 22.00 horas.
Sonaron canciones de su nuevo disco como Ari, Ari-O o Pa' que, además de recuperar algún éxito como Para que tú no llores así. Pero la primera sorpresa de la noche surgió cuando se marcó unos minutos de percusión flamenca, que terminó de animar a un público que no dudó en bailara al son del ritmo.
La segunda sorpresa la puso el artista Jorge Pardo, que acompañó a Carmona en la canción que da título a su nuevo disco, De Noche, además del conocido No estamos locos. Pasada una hora, Carmona se despidió del público, pero cantó una canción más, tras la cual salió del escenario. Pero la gente no pensó que el espectáculo había acabado, y pidieron que el artista volviera. Y lo hizo para cantar Se dejaba llevar, en memoria de «un maestro entre los maestros, Antonio Vega».
Después de este homenaje, el cantante invitó a sus primos de la Isla a acompañarlo sobre el escenario, expresando que era «la mejor manera de terminar, con gente de Mallorca, como tiene que ser». Pero aún había Carmona para rato.
Después de tocar un par de temas junto a sus familiares, los despidió, para poner punto y final al espectáculo tras cantar el primer single de su disco, Bum bum, momentos antes de las doce y partir con un «ahora sí, me despido». Y se marchó entre aplausos del público.