Hace 19 años que Ur Teatro, una compañía vasca «de pueblo», estrenó una versión contemporánea de uno de los Shakespeare más celebrados, Sueño de una noche de verano . El Premio Nacional de Teatro de 1993 confirmó la gran acogida de este montaje que se repuso en 1998 y 2009. Ahora, tras año y medio de gira, la compañía dirá adiós a este espectáculo «mágico» en el Teatre Principal de Palma, que se estrenó ayer y se podrá ver hoy, a las 21.00, y mañana, a las 19.00.
No es una casualidad que la última función coincida con el Día Mundial del Teatro, «hemos movido unos cuantos hilos», aseguró Pep Lluís Gallardo, jefe de producción del Principal. «Es una obra que gusta porque es un Shakespeare joven, una comedia que habla y se ríe del amor en todas sus vertientes. Es muy divertida», explica el intérprete José Tomé.
«Creo que parte del mérito reside en la relación que creamos con el público», confiesa Ana Pimenta, actriz y hermana de la directora, Helena Pimenta, quien, al igual que sus compañeros, afirma: «Es imposible descifrar la fórmula del éxito de este montaje durante tantos años». «Lo que sí sabemos es que ahora somos más viejos, estamos más gordos y menos ágiles», bromeó Tomé.