¿Quién no ha querido viajar a ciudades como Nueva York, Londres o París al salir de una sala de cine? Aunque el turismo cinematográfico es todavía «un eje económico casi desconocido», Stefan Roesch, periodista alemán y estudioso del impacto de esta modalidad turística, ha visitado rincones del mundo donde se han rodado algunas de las mayores producciones y ha analizado su impacto en el turismo. Roesch impartirá mañana una charla en la Cambra de Comerç de Mallorca, en Palma, a las 10.30, dentro del programa de las primeras Jornades de Cine, Turisme i Territori que organiza la Mallorca Film Commission.
En 2003, tras el bombazo del El señor de los anillos , de Peter Jackson, Roesch se trasladó a Nueva Zelanda para conocer de primera mano el impacto turístico a raíz del estreno del filme, temática que aprovechó «para escribir mi tesis doctoral». «La afluencia turística aumentó un 40 por ciento, sobre todo en la franja femenina». «Los filmes son un reclamo clave para promover destinos turísticos», indica el periodista, quien asegura: «Las películas y las series de televisión inspiran al turista y muchas ciudades han visto como el 60 por ciento de sus visitantes lo hace para conocer localizaciones que han visto en el cine o la televisión». Nueva York o Londres serían el paradigma del boom turístico cinematográfico», añade.
Según Roesch, la tarea de promoción y proyección de las localizaciones debería ser una labor de «las diferentes ciudades. Las comisiones de cine y las organizaciones turísticas del lugar deben desarrollar diferentes planes de turismo, pero con responsabilidad y sin pretender engañar al turista. Es importante desarrollar una buena campaña de marketing y promocionar los lugares de rodaje más interesantes».
Además, el periodista asegura que el turismo cinematográfico ha «reactivado» la economía de algunos países como, por ejemplo, Túnez o Malta. «Sus tasas son muy baratas, pero el beneficio es mucho mayor de lo que ellos gastan. Eso siempre es beneficioso». En el caso de España, Roesch destaca la «gran promoción» que Woody Allen hizo de Barcelona con el filme Vicky Cristina Barcelona .
La labor de Roesch se puede encontrar en su libro The experiences of film locations tourists.