Mucho color y muchas sonrisas se dejaron ver ayer en la carpa ubicada en el Pati de La Misericòrdia de Palma, espacio que aloja la 22 edición de la Setmana del Llibre en Català, que acogió una primera jornada marcada por la literatura infantil dirigida a los más pequeños, que disfrutaron con los cuentacuentos y los talleres. «A los padres nos encanta ver a nuestros hijos disfrutando con este tipo de actividades», dijo Teresa Gómez, una de las madres.
La cuentacuentos Maria Bimbolles encandiló a unos niños y niñas que se dejaron cautivar por las historias fantásticas que allí les relataban, siempre con un objetivo didáctico. «A mi hija le encantan los cuentacuentos, ayer estuvo todo el día recordándonos que hoy teníamos que venir», aseguró Maria Tortell.
Otra de las propuestas de la mañana fue un taller de ximbombas, con el que los pequeños disfrutaron creando al mismo tiempo que aprendían diferentes ritmos y melodías con este instrumento tan nuestro.
Además de niños y niñas, este primer día de la Setmana del Llibre destacó por la gran afluencia de público, unos asistentes que sabían lo que querían. «He encontrado varios libros sobre música, en especial sobre rock, que hacía tiempo que andaba buscando», aseguraba Pep Oliver, de 22 años.
Los libros especializados, la novela y la no ficción fueron los que más se vendieron, aunque «la gente está un poco reticente a comprar, piden muchos precios, pero para ser el primer día está yendo muy bien», afirmó Maria Barceló, de la librería Lluna de Palma.
Para el día de hoy, domingo, se espera también una gran afluencia infantil ya que el programa previsto incluye un cuentacuentos, a cargo de Nati de Grado, y el taller La natura dels instruments.
Activista
La encargada de leer el pregón en la inauguración de la Setmana de Llibre, Lolita Bosch, también se dejo ver por La Misericòrdia para charlar sobre su nuevo libro, Ara, escric. La escritora confesó: «No leo los artículos de prensa sobre mi. Yo soy así. No me gusta la jerarquía del escritor frente al lector, a mi me gusta ir en metro. Eso si, me gusta la cercanía del lector y poder mantener una conversación interesante. Soy una persona muy social y activista».
Ara, escric es una fusión de «ensayo y novela», un libro «muy personal».