El museo Can Prunera, el Castell d'Alaró y la Ciutat Romana de Pol·lèntia se han quedado fuera de los presupuestos para 2011 y, por lo tanto, no se cumplirán los compromisos adquiridos por el Ministerio de Cultura con dichos proyectos.
La titular del departamento, Àngeles González-Sinde, que compareció ayer en el Senado para dar cuenta sobre los fondos del 1% Cultural, respondió a las preguntas sobre inversiones planteadas por el senador del Grupo Mixto, Pere Sampol, de forma escueta y sin facilitar más explicaciones salvo que «lamentablemente ha habido que hacer ajustes en estos dos proyectos y no va a haber ese apoyo», en alusión a las subvenciones en Pol·lèntia y al compromiso asumido el pasado año para la reforma de Can Prunera.
Respecto a la inyección prevista para la reforma del Castell d'Alaró para 2011, la ministra ni siquiera hizo mención. «En cuanto a las inversiones en Balears, desde luego que no las dejaremos y estaremos presentes en ellas porque Baleares necesita mucho de las inversiones. Cuando gobernó el PP no construyó ni un solo museo ni restauró nada y aquello lo dejaron como un erial, puesto que tenían otros objetivos en materia de difusión de la cultura y de las actividades culturales que hoy están dirimiéndose en los tribunales», señaló la ministra.
Alaró
Cabe recordar que con esta decisión, el Ministerio de Cultura rompe con el compromiso que adquirió en la firma del convenio con la Fundación Castell d'Alaró en 2009, por el que Cultura pagaría a esta institución 1 millón de euros en cuatro años. Esta inversión plurianual se consiguió gracias a la iniciativa de Sampol, que recogió la solicitud de inversiones por parte de la Fundación del Castell y la incluyó en una enmienda que fue aprobada en los presupuestos generales del Estado de 2009. En 2010 se destinaron 200.000 euros y sobre las siguientes partidas, según lo anunciado, se agotó el grifo económico.
Ante la noticia, el presidente de la fundación, Mateu Marcus, defendió la inversión prevista porque «era indispensable para el mantenimiento de la fortificación, sin ella, su estado peligra seriamente» y recordó que «las ruinas de la fortificación son propiedad del Estado y deben velar por ellas».
Sampol expresó ayer su indignación y calificó de «inaceptable» que «no exista presupuesto para partidas que ya estaban asignadas» e informó que solicitará una reunión urgente con Cultura para tratar estas cuestiones en profundidad. Si no fructificara, Sampol, adelantó, elaboraría una moción para que este tema sea debatido en el Senado. Cabe recordar que Sampol y el PSOE transaccionaron dos enmiendas para dedicar inversión adicional en los Presupuestos Generales en 2011 para los proyectos de Can Prunera y el Castell d'Alaró, pero no pudieron ser incluidas por el veto que aprobó el Senado a las cuentas públicas.