Existe en la Cartoixa de Valldemossa una compleja convivencia entre turismo y patrimonio. Una investigación del Grup de Conservació del Patrimoni Artístic Religiós de la Universitat de les Illes Balears, que dirige la doctora Mercè Gambús, ha analizado la incidencia del turismo en el conjunto monumental de la Cartoixa de Valldemossa y confirma esta tesis.
La explotación turística del monumento desde mediados del XX sin un plan museístico unitario ha generado contradicciones de tipo conceptual, una interpretación complicada del conjunto y una mala conservación. Por ello, los investigadores creen que el turismo lo degrada y para ponerle freno proponen la elaboración de un plan director unitario.
La Cartoixa es «un monumento inacabado, desamortizado, disperso y dividido», explicó Gambús; por ello, el estudio sostiene que esa desmembración y el hecho de que históricamente haya tenido y tenga diferentes propietarios ha privado al visitante, al turista, de una lectura unitaria y correcta de las diferentes partes del monumento. «El edificio no se comprende. Para empezar, por ejemplo, el recorrido se hace a la inversa. Se entra por la iglesia y se sale por el Palau del Rei Sancho, y debería ser al contrario», explica la investigadora, quien subraya que el visitante sale confundido porque no hay discurso museológico, no hay señalizaciones, hay zonas que no son accesibles, existe una degradación de los espacios comunitarios, y dificultades para interpretar los espacios y los objetos que se muestran en ellos. Todo ello, «provoca la degradación de la Cartoixa como bien patrimonial, porque le niega la posibilidad de explicar por sí misma sus transformaciones y su riqueza mediante un discurso histórico diacrónico».
El estudio de la UIB apuesta por resolver estos problemas, por hacer una revisión crítica del modelo de conservación, uso y gestión, que permita desarrollar uno nuevo que recupere el valor y el significado histórico. Según Gambús, la elaboración del plan director no suele ser un planteamiento habitual en las cartujas, pero sí recomendables.